Con un accidentado debate, los diputados aprobaron ayer, a las 8:21 p. m., el plan de ley que prohíbe la cacería deportiva en el país.
La propuesta señala multas hasta de ¢1,5 millones para quienes maten animales sin que sea por subsistencia, con fines científicos o para controlar especies.
Además, fija multas hasta de ¢900.000 para quien trafique especies de vida silvestre; es decir, los animales que pueden sobrevivir sin la intervención del hombre.
Con el voto afirmativo de 41 legisladores y cinco en contra, el proyecto que reforma la ley de vida silvestre pasó el primero de dos debates. Se trata de la primera norma que se aprueba en el país a partir de la iniciativa de los ciudadanos.
El proyecto, que se discutió bajo el expediente 17.054, es producto del apoyo de 177.000 firmas, recogidas en su mayoría por simpatizantes de la organización ambientalista Apreflofas, que llevó la reforma de ley a manos de los diputados.
La Ley de Iniciativa Popular, vigente desde 2005, fue el instrumento que les permitió a los ciudadanos poner el plan en el Congreso y que derivó en la discusión de castigos a la cacería deportiva en el país.
La contra. El proyecto contó con la oposición de los diputados del Movimiento Libertario que, encabezados por su jefe de fracción, Carlos Góngora, y por el guanacasteco Ernesto Chavarría, señalaron errores en el proceso previo a la votación.
“Hoy en Costa Rica está sucediendo algo que no pasaba desde hace muchos años. Hoy se está inventando un término nuevo: ‘el animalicidio’, el hombre se está convirtiendo en algo que mata, porque si ya existe el homicidio porque el hombre mata al hombre, y el femicidio porque el hombre mata a la mujer, hoy se crea el animalicidio, porque el hombre mata al animal (...). El hombre es el que hace todo lo malo, incluyendo a la mujer ”, agregó el legislador, al tratar de señalar que con la ley tanto el hombre como la mujer hacen maldad.
Sin embargo, las demás fracciones habían invertido dos días en la discusión de un texto de consenso que tomara como base la propuesta ciudadana como para echar atrás ante el llamado de Chavarría.
“Esta es una buena experiencia y tenía que ser en materia de ambiente en donde el país ha sido pionero. La Unidad Social Cristiana está a favor”, dijo el subjefe del PUSC, Rodolfo Sotomayor.
Para el diputado José María Villalta, los argumentos de Chavarría no fueron de recibo y resaltó que la mala explotación de la vida silvestre está llevando al ser humano hacia su propia destrucción.