Llenar los zapatos de un humorista e imitador como Froylán Bolaños es una faena difícil de sacar, y el equipo de Pelando el ojo lo sabe bien. Por eso, cuando sus compañeros tomaron la decisión de continuar con este espacio radial tenían claro algo: antes que sustituir a su amigo se le tenía que dar un segundo aire al programa.
Quien fuera por 8 años una de las voces de este popular espacio, murió a los 55 años, el 21 de noviembre del 2009, a causa de un paro cardiorrespiratorio.
A vísperas de que se cumpla un año de su muerte, Pelando el ojo recuerda a su compañero del alma, con un programa especial dedicado a él, con muchos anécdotas de por medio y haciendo un balance del rumbo que ha tomado el programa en este tiempo.
Sobre el nuevo renacer y los retos a los que se han tenido que enfrentar para mantenerse en el gusto del público, hablaron con Viva los integrantes del programa, que ahora está conformado por Antonio Hernández y Roque Ramírez (las más recientes incorporaciones); Natalia Monge, Cristian Hernández, Ricardo Sáenz y Norval Calvo.
Despertar. ¿Cómo ha sido este año para Pelando el ojo?
Norval: Ha sido muy difícil. Al comienzo, nos planteamos qué iba a pasar. Cuando murió Froylán nos sentamos Natalia, Cristian y yo a decidir si continuábamos o no con el programa. Decidimos que había más razones para continuar.
Cristian: Decidimos continuar, pero eso significó replantearnos todo el programa.
Natalia: No quisiera ver esto como una sustitución de Froylán, sino como un renacimiento de Pelando el ojo.
La partida de Froylán no significó una pausa en el programa. ¿Cómo se hace para hacer reír a los demás cuando no se puede hacer lo propio con uno mismo?
Norval: Esa es la parte más difícil. No tuvimos derecho al luto, teníamos el compromiso de volver al aire. No éramos solo nosotros, había mucha gente detrás del programa, compromisos que teníamos que cumplir.
“Ese año, Pelando el ojo estuvo en las corridas, la gente no tenía idea del dolor, del vacío que sentíamos. Esto se trata de hacer reír y qué difícil hacerlo cuando la procesión se lleva por dentro”.
Pelando el ojo siempre tuvo claro que la función debía continuar. ¿Sintieron temor de que sin Bolaños el espacio bajaría su calidad?
Cristian: Claro que sentíamos temor. Pero en ese momento lo más importante fue terminar el año. El siguiente año (el 2010) decidimos qué se iba a hacer para replantear el programa. Pero, por dicha, los patrocinadores, Monumental y el público nos apoyaron.
Norval: Aunque había temor, siempre sentimos que teníamos una fortaleza y esa era que Cristian y yo siempre nos encargamos de la producción del programa. Ya sabíamos como era el teje y maneje de la producción del espacio.
¿Fue difícil encontrar a los nuevos compañeros de equipo?
Norval: Fue muy difícil. Recibimos muchas audiciones y no podíamos fallar a la hora de escoger.
“Es muy difícil, cuesta encontrar a un imitador que tenga todo el potencial que tenía Froylán”.
¿Se han logrado acoplar por completo las nuevas fichas?
Norval: Fue un poco difícil al principio que tomaran el ritmo.
Cristian: Al principio se tomó la decisión de no tocar los personajes de Froylán, pero después se volvieron a retomar algunos, porque también había que complacer al público. No hemos recuperado todos, pero entre los que tenemos están el de Hernán Medford, Mauricio Montero y Rodrigo Arias.
Antonio: Fue un gran reto. Aunque tenía experiencia en esto, no estaba acostumbrado a trabajar con guiones. Sabía que estaba ocupando el lugar de un gran imitador y pensaba si eso molestaría a la gente.
Natalia: Tras la muerte de Froylán, mis visitas al programa se intensificaron; fui adquiriendo un compromiso con ellos.
Roque: Fue un reto bastante interesante. Siempre había trabajado solo y ahora lo tenía que hacer en equipo. Me acuerdo que los dos primeros meses casi que ni hablaba.
Dirección. ¿Qué criterios toman en cuenta a la hora de escoger a las personalidades que se imitan?
Norval: Primero que nada, tomamos en cuenta el impacto de la persona, el peso que tenga en el público. Después vemos si nos salen las imitaciones.
¿Hacia dónde camina Pelando el ojo en la actualidad?
Norval: Ahorita estamos logrando la fórmula de un segundo aire, entrando en una nueva etapa del programa.
Natalia: Hay mucho por hacer, en esto nunca se encuentra una zona de comodidad, siempre hay cosas qué perfeccionar.
En algún momento se habló de una revista de humor, ¿qué pasó con ese proyecto?
Norval: Eso está en stand by. Por ahora no queremos contaminar el programa con otras cosas.