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La politóloga argentina Pía Mancini se frustró de trabajar en campañas políticas que manejan estrategias enclavadas en el pasado.
Ella cree que el sistema democrático está estancado y no responde a las nuevas demandas de una sociedad que está siendo transformada por las nuevas tecnologías.
Mancini es la fundadora del proyecto Democracia en Red , una iniciativa para promover la participación real de los cuidadanos en las decisiones políticas, pero desde una plataforma virtual como lo es Internet. Ella fue una de las expositoras invitadas al ciclo de conferencias TEDX Pura Vida 2014.
Mancini conversó con La Nación sobre la relación entre sistema democrático y redes sociales.
¿Qué papel juegan Internet y las redes sociales en la difusión de los mensajes políticos?
Internet permite transformar un mensaje que alguna vez fue unidireccional hacia una conversación que va de muchos para muchos. Si bien es resultado de un gran cambio en las tecnologías de la información, esta es la primera vez en la historia desde la invención de la imprenta que el mensaje está descentralizado. La comunicación ya no está concentrada en unos pocos sino que está distribuida entre varias personas que puede conversar entre sí.
¿Está el sistema político aprovechando las herramientas que le ofrece Internet?
No. Y ya es hora de empezar a innovar en un campo en el que nunca se ha innovado. Si tú ves, la mayoría de los presidentes o jefes de Gobierno tienen sus cuentas de Twitter, pero son realmente unos pocos los que van más allá del monólogo y del mensaje unidireccional. Por ejemplo, Cristina Fernández (presidenta de Argentina) usa muchísimo su Twitter , pero solo para pasar sus mensajes, no para conversar. Me parece que lo que les hace falta a los políticos es entender que este es un mecanismo de doble vía.
¿Qué es lo que tiene Internet que la hace única como medio de comunicación?
La riqueza de la red está en aceptar que hay otros que tienen otras posturas y en poder conversar sobre esas posturas. La red permite generar un espacio en donde se va a persuadir y a ser persuadido. Si nosotros utilizamos las redes sociales como un canal unidireccional para pasar un mensaje, nos estamos perdiendo de su potencial.
¿Es necesario educar al usuario para que aprenda a utilizar el espacio virtual para hacerse oír?
Las nuevas tecnologías por sí mismas no son las que van a producir los cambios profundos en la sociedad. La transformación se va a dar cuando esas herramientas produzcan nuevos comportamientos. Hace poco leí un artículo sobre la endogamia en Twitter. Ahí se analizaban los tuits en torno a un tema político específico que era el control de armas en Estados Unidos. Lo interesante fue que tanto los que estaban en contra como los que estaban a favor solamente ‘retuiteaban’, compartían y conversaban con los de su mismo bando. Había muy pocos que realmente se cruzaban entre ambos grupos. Una herramienta como Twitter puede llegar a polarizar las opiniones.
¿Cómo se desarrolla en Internet el liderazgo en medio de tantas voces disonantes?
La red propone otro tipo de representación diferente a la tradicional. En el mundo virtual hay espacio para líderes emergentes de la sociedad civil que pueden llegar e tener muchísima influencia. Internet da la oportunidad a personas con una trayectoria importante de tener acceso a espacios de poder que jamás pudieron alcanzar en el sistema tradicional. Es necesario hackear la democracia, es decir, entender cómo funciona este sistema para poder proponer mejoras.
¿En qué consiste el proyecto Democracia en Red?
Es una fundación que busca promover instancias nuevas de participación ciudadana apoyadas en la tecnología para mejorar el sistema que tenemos. Tiene que ver con desarrollar tecnología para la participación cívica, pero además generar las condiciones para el uso de esa tecnología. Por ejemplo, en Buenos Aires enseñamos a chicos de escuelas públicas a usar la tecnología para generar información, a usar el Facebook para hacer visibles sus demandas y empoderarse.
