El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) propondrá a los diputados duplicar o triplicar el adelanto de fondos públicos que reciben los partidos políticos antes de las elecciones y crear un incentivo fiscal para promover las pequeñas donaciones.
Además, el TSE pedirá que el servicio público de autobús sea gratuito el día de las votaciones y no descarta la idea de que televisoras y radioemisoras tengan que ceder espacios, durante la campaña, para que los partidos transmitan su propaganda.
Estos son los principales rasgos de una reforma que el Tribunal enviará al Congreso en las próximas semanas, según detalló Diego Brenes, asesor de Gestión Política de ese órgano electoral.
Brenes precisó que la intención es que estos cambios entren a regir para las votaciones del 2014, junto con la eliminación del sistema de bonos de deuda política.
Tal mecanismo fue la principal herramienta que usaron los grupos políticos en el 2010 para captar efectivo y pagar servicios.
Sin embargo, el TSE considera que este es un sistema “perverso”, recordó Brenes, pues los bonos dependen de las encuestas y eso genera desigualdad.
El funcionario sostuvo que la reforma busca una mayor equidad y transparencia en el financiamiento partidario, el cual fue objeto de escándalos durante los últimos dos años.
Impacto. Actualmente, el dinero que se les puede adelantar a los partidos equivale a un 15% de la deuda política y el TSE quiere subirlo a un 30% o un 50%.
La financiación anticipada podría aumentar de ¢560 millones a ¢1.120 millones por cada partido que postule candidato presidencial, si los diputados optaran por el 30% y si hubiese nueve aspirantes, igual que en el 2010.
Sin embargo, dicho aporte subiría solo de ¢324 millones a ¢648 millones si los diputados acogen una recomendación de la Comisión legislativa de Asuntos Electorales, de rebajar la deuda política de un 0,19% del producto interno bruto (PIB) a un 0,11%.
En cuanto al incentivo para donantes, este se aplicaría a montos inferiores a ¢3,8 millones (diez salarios base) y consistiría en que los aportes serían deducibles en el cálculo del impuesto de renta.
Según Brenes, la idea es promover que muchas personas hagan donaciones bajas, en lugar de que pocos hagan donaciones altas.
Sobre los espacios en radio y televisión que el TSE se encargaría de repartir, estos representaron cerca de 40% de los gastos de los partidos en la última campaña.
Sopesan cambios. El diputado liberacionista Fabio Molina, presidente de la Comisión de Electorales, sostuvo que sería muy sano que los partidos dispongan de más efectivo para empezar sus campañas.
Jeannette Ruiz, del Partido Acción Ciudadana (PAC), apoya la propuesta de que las televisoras y radioemisoras cedan espacios publicitarios. De hecho, ella lo pidió en un plan de reforma constitucional.
Sin embargo, Molina alegó que una repartición de estos espacios no podría ser igual para una agrupación que recibe el 40% de los votos y para otra que recibe el 3%.
A Óscar López, presidente del Partido Accesibilidad Sin Exclusión (PASE), le gustó la idea de los campos publicitarios.
Sin embargo, sobre el financiamiento adelantado, dijo que no se soluciona nada si los partidos tienen que dar una garantía al TSE (como una propiedad) que responda en caso de que no obtengan votos suficientes para recibir deuda.
Por su parte, Maritza Hernández, presidenta de la Cámara Nacional Transportes, comentó que desde hace tres campañas los autobuses dan viajes gratuitos a los votantes que lo necesiten.
Alegó que un servicio totalmente gratis ese día podría provocar que las líneas se saturen de gente que solo quiere pasear.
Mientras, Gustavo Piedra, presidente de la Cámara Nacional de Radio, indicó que hoy evaluarán con un asesor jurídico la propuesta sobre espacios para propaganda.