Santiago de Chile. AP La Iglesia Católica chilena pidió perdón hoya las víctimas de abusos sexuales cometidos por religiosos y reconoció que no actuó oportunamente para evitarlos.
Expresamos nuestro profundo dolor por los casos pasados y recientes de abusos de menores y jóvenes cometidos por miembros del clero y personas consagradas, señaló una declaración emitida por la Conferencia Episcopal, que estuvo reunida durante la semana.
Los obispos ofrecieron humildemente nuestra petición de perdón y el apoyo que podamos darles, además de nuestra oración a las vÍctimas y reconocieron que no siempre hemos reaccionado con prontitud y eficacia ante las denuncias.
La declaración fue leída por el presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
Varios sacerdotes y una monja se han visto involucrados en casos de abuso. Un cura fue condenado recientemente, pero el caso más sonado ha sido el del ahora retirado párroco de un sector elegante de esta capital, Fernando Karadima, sancionado incluso por el Vaticano.
El anciano sacerdote, que inicialmente recibió el apoyo de un obispo, fue confinado por la jerarquía eclesiástica y suspendido de sus derechos sacerdotales, pero también la justicia inició una investigación. La indagación judicial, sin embargo, se ha visto trabada por la negativa de la Iglesia a entregar los antecedentes del juicio canónico a menos que se requiera por la vía diplomática al Vaticano.
En su declaración los 32 obispos chilenos manifestaron cercanía y solidaridad con las vÍctimas de estos abusos y con sus familias y hacemos nuestros sus sufrimientos.
En aparente respuesta a las críticas por no haber actuado oportunamente, los obispos anunciaron que crearán un organismo de prevención de abusos y de ayuda a las víctimas. Señalaron que los abusadores no tienen lugar en el sacerdocio y que perfeccionarán la selección de los candidatos.
Los abusos sexuales de algunos religiosos han puesto en el centro de la polémica a la jerarquía eclesiástica. Algunos religiosos incluso apuntaron sus críticas al recién retirado cardenal arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz, por no haber acogido oportunamente hace diez años las sospechas de abusos que pesaban sobre Karadima.
El católico expresidente Eduardo Frei comentó hoy que la iglesia chilena no ha hecho la tarea que debió hacer en alusión a purgar a los religiosos acusados de abuso y pasar el caso al Vaticano.