Patricia Janiot difícilmente requiere introducción. Ella, toda ella, es la imagen por excelencia de CNN en Español.
Es más, bien podría decirse en realidad que esta periodista, nacida en Colombia, es la “mamá-madrina-estrella” de la versión en castellano de este noticiario de 24 horas al día, durante los siete días de la semana.
Con toda certeza usted la ha visto con su talante y su porte al frente del noticiario Panorama Mundial , que sale al aire de lunes a viernes en las noches desde Atlanta, Estados Unidos, o desde algún punto de nuestra variopinta Latinoamérica, hablando de “tú a tú” con alguno de los líderes más importantes o polémicos de la región.
Algunos de los que han pasado por sus “armas” fueron Fidel Castro y al entonces exdictador Augusto Pinochet. También ha entrevistado a figuras estadounidenses del talante de Colin Powell (exsecretario de Estado) y Bill Clinton.
Esta colombiana, madre de dos hijos y amante del golf se muestra complacida con los logros alcanzados en sus 15 años en CNN, de los cuales ha dedicado los últimos diez al noticiario en español que, por cierto, está de manteles largos por sus dos lustros de vida.
En una amplia entrevista con Viva , vía telefónica desde Atlanta –sede del emporio mediático– , Janiot habló de su trabajo en la cadena de noticias, de su vida y de un proyecto que, desde el 2001, desarrolla con intensidad en su tierra natal a favor de los niños.
¿Cuál es el balance que Patricia Janiot hace de los diez años de CNN en Español?
Hemos logrado consolidarnos como la cadena de noticias por excelencia. Es un reto muy grande. Somos líderes y es una gran satisfacción a nivel de crecimiento personal, profesional y de logro empresarial… ¡hay mucho por celebrar!
¿Cómo definirías el enfoque de CNN en Español? ¿Tiene un marcado acento proestadounidense o es contraria a la izquierda política?
No tenemos matrícula política. Es difícil ,pero a la hora de tomar decisiones sobre a quién entrevistar o no entrevistar, se marca un juicio de valor sobre el desarrollo de la noticia. En la mayoría de los casos tratamos de estar en el centro, investigando, entrevistando a las dos caras de la moneda, aunque a veces son 10, 20, 100 y hasta 20.000 matices. Quizá por tener informaciones de primera mano por estar en Estados Unidos la gente nos tilda de estadounidense, pero nadie más que nosotros sabemos que CNN en Español refleja la realidad de toda la región.
Personalmente, ¿cuál es tu logro más importante en estos años en la cadena?
Hemos estado cubriendo en vivo y en directo acontecimientos que han transformado la historia de la región en estos años. Hemos podido tomarle el pulso a la gente y ver a una Latinoamérica mucho más activa, más participativa; una población que pide cambios, una región clamando por menos pobreza, más igualdad, más respeto a los derechos humanos y más conciencia con el medio ambiente.
A partir de tu conocimiento sobre la región, ¿cómo valorás el desarrollo de Latinoamérica en los años recientes?
Hemos visto una América Latina muy pujante en términos de inversión, desarrollo, de pequeños empresarios tratando de innovar; pero, también, hemos visto a una Latinoamérica, en su gran mayoría, con una gran deuda en términos de educación y salud. Es un gran contraste y, bueno, lo hemos visto con las políticas de los finales de los años 80 y los 90 que no dieron sus frutos; no fueron la receta mágica para salir del retraso. Esto permitió la aparición de caudillos y que resultan personajes muy atractivos en la región.
¿Ha dimensionado Patricia Janiot la influencia que ejerce su figura (ella fue nombrada una de las 100 periodistas/ejecutivas latinas más influyentes en los Estados Unidos) en la opinión pública latinoamericana?
A veces es difícil medirlo y no es tan inmediata la reacción por estar en Atlanta. A veces pierdo esa dimensión. Los únicos termómetros son cuando vemos los mensajes que nos llegan por Internet o cuando viajamos por Latinoamérica. Es muy cierto de que tenemos una enorme responsabilidad, ya que tenemos que lidiar con reputaciones, con carreras políticas; en fin, con la fibra humana, y por eso hay que hacer un trabajo profesional. Es nuestra responsabilidad, por lo tanto, mantener independencia y credibilidad, el bien más preciado.
Retomo la pregunta de hace un rato: ¿algún momento difícil, enternecedor o dramático en tus años en CNN?
La cobertura de los atentados del 11 de setiembre. Fue conmovedor, el momento más trágico y, obviamente, si cubres una guerra civil verás más drama, pero más espaciada en el tiempo y en el lugar; pero, en este caso (los atentados) fue por las repercusiones: lo difícil de llegar al lugar, horas y horas hablando de la tragedia ajena y, entre más entrevistaba a los afectados, más duro era el golpe. Para mí fue un campanazo sobre si lo que estaba haciendo tenía sentido, y uno se cuestiona la esencia de la noticia. Fue autoinvolucrarme en “Colombianito”.
Ahora que hablás de “Colombianito”, ¿qué tal ha sido el trabajo en este proyecto que ayuda a niños de tu país?
Es precioso, es de las cosas más gratificantes que he hecho en mi vida. Son 2.500 niños en cinco ciudades de Colombia. Uno lidera, les das ejemplos y a raíz de esas acciones ellos pueden caminar, estudiar. Se trata de un programa de ligas de futbol en zonas muy pobres, y busca que los niños estudien pero, a la vez, que no estén en las calles sin hacer nada. Aunque ellos crean que juegan futbol, en el fondo es mantenerlos alejados de drogas, crimen y llenarlos de valores.
¿Qué huella dejó en la Patricia Janiot de ahora haber pasado por dos certámenes de belleza (ella fue virreina y finalista en un Miss Mundo en 1983)?
Me abrió las puertas al mundo de la comunicación. Te da algunas tablas para enfrentar la carrera que decides escoger. Hay gente que cree que su única meta es casarse con hombres ricos; cuando la belleza se acaba… ¿qué te queda? Para mí fue la puerta abierta para un mundo maravilloso.
Si tuvieras que preparar una receta con los valores que te han curtido en tus años en la profesión, ¿cuáles serían esos ingredientes?
Ante todo ser justa y mantener distancia. El hecho de que estemos lejos de América Latina nos beneficia; nos permite no involucrarnos mucho de lleno, excepto cuando se trata de uno de nuestros países. En general, el hecho de que estemos aquí nos permite ver los toros desde la barrera y hacer algo ecuánime.
¿Qué de tu pasado cambiarías para el presente o para el futuro?
Me gustaría tener más tiempo para leer. Mi literatura se limita a la actualidad: cables y agencias. Solo para contarte: en mi mesa de noche tengo cuatro libros empezados pero no los he terminado. Quisiera tener más tiempo para leer. Como madre uno se cuestiona el tiempo para sus hijos. Estoy aprendiendo a no contestar el celular. Después del 2001 (de los atentados) puedo dedicarle tiempo a mi trabajo, a mi familia y devolver una parte de las bondades que he recibido. “Colombianitos” me dio una lección enorme: nunca digas que no tienes tiempo para cosas que son prioridad, siempre sacarás tiempo para hacerlo.
Tres regalos que les dejarías a tus hijos y a tus televidentes…
A mis hijos: solidaridad, objetivos en la vida y mucha salud; a los televidentes, el ánimo de buscar la verdad, investigación y cobertura continua y actualizada.