En 1983 la industria de los videojuegos sufrió su primera gran debacle. Cuenta la leyenda que bajo dichas circunstancias, fueron enterrados en el desierto de Nuevo México miles de copias de varios juegos de Atari 2600. Destaca sobre todos, E.T. el extraterrestre, considerado por muchos como el peor juego jamás creado, y cuya sobreproducción de cartuchos provocó un exceso de inventario de millones de copias que terminaron en el más peculiar de los cementerios.
En un hallazgo inverosímil y ante el asombro de todos aquellos que consideraban el entierro un mito, el pasado sábado 26 de abril del 2014, fueron hallados miles de cartuchos del juego E.T., gracias a una excavación realizada por Microsoft con el propósito de desentrañar el misterio. El financiamiento de la expedición viene precedido por la creación del documental: "Atari: Game Over", exclusivo para Xbox 360 y Xbox One que relatará la convulsa historia de Atari, lo cual ha generado cierta desconfianza a la noticia en algunos sectores.
La caída de Atari y el entierro
En 1982 el Atari 2600 era la consola del momento, por lo que su empresa madre, Atari, confiada en el éxito obtenido anteriormente al portar algunas versiones de sus juegos de arcadia a consola, quiso emular el éxito que obtuvo la película E.T. El Extraterrestre en el el cine, en el mundo de los videojuegos. El resultado fue, cuando menos espantoso, ya que la compañía se empeñó en tener el título listo antes de la temporada navideña de ese mismo año, por lo que los desarrolladores solo tuvieron 5 semanas para dar vida al juego en la nueva plataforma.
A pesar de que la versión del videojuego, Pac-Man para Atari 2600 sí fue muy exitosa, la ambición de la compañía también los dejó mal parados en ese caso. Atari ordenó la producción de 12 millones de copias de Pac-Man, incluso cuando solo habían vendido unas 10 millones de consolas. Esto hizo que quedaran más de 5 millones en stock que sencillamente nadie compró. De manera similar, E.T., a pesar de su baja calidad, logró vender unas 1.5 millones de copias, el problema es que Atari había producido 5 millones.
Este exceso de confianza y algunas prácticas comerciales de baja clase, como el obligar a los distribuidores y tiendas a comprarles los juegos en paquetes que incluían un juego bueno y un juego malo, hundió completamente a Atari, pues las devoluciones de juegos que no lograban vender se volvieron algo muy común.
De manera que de 5 millones de copias producidas de E.T., 3.5 millones terminaron trituradas y enterradas junto con las unidades de Pac-Man, otros juegos y algunas consolas, hace unos 30 años en el vertedero de Alamagordo, Nuevo México.
Se dice que los pobladores pudieron ver a los camiones que transportaban algo hacia el desierto para ser enterrado, sin embargo con la desaparición de Atari, esta historia pasó a convertirse en una de las leyendas urbanas de tecnología más conocidas en el mundo. Esto a pesar que la prensa de hace treinta años se tomó muy en serio la noticia, en especial cuando uno que otro representante de la difunta compañía la confirmó en distintos momentos.
El hallazgo, la excavación y el documental
Pero donde algunos ven un mito, otros suelen ir en busca de la verdad, hasta encontrarla. Movidos, eso sí también por motivos económicos, Microsoft y las productoras Light Box y Fuel Entertaiment prepararon una expedición y excavación al lugar en el que se suponía, que se guardaba el singular tesoro, el desierto de Alamogordo en Nuevo México.
El equipo consiguió localizar la zona aproximada en el desierto de Alamogordo donde se pudo haber producido el entierro, hace algo menos de un año, e incluso trazaron un punto más o menos exacto donde iniciar las excavaciones. Sin embargo, debido a la negativa recurrente al intentar obtener los permisos necesarios, no fue posible desenterrar los cartuchos hasta el pasado sábado 26 de abril, día finalmente designado en el calendario para tan magno evento.
Larry Hryb, director de programación de Xbox (más conocido en internet por su nickname “Major Nelson“) fue uno de los encargados de retransmitir a través de su cuenta de Twitter como fue el proceso de búsqueda de los cartuchos para todos aquellos que no pudieron acudir a ver el proceso de la excavación, ya que Microsoft invitó por igual, a fans de la consola y curiosos, a acercarse al sitio y participar en la actividad.
Cerca del sitio de excavación se instalaron algunas consolas para que los fanáticos y reporteros pudieran “disfrutar” del juego mientras se realizaba el procedimiento. Tras unas horas de espera e incertidumbre, por fin se encontraron los cartuchos del juego, curiosamente junto a las copias del juego “E.T.” se encontraron también algunas unidades de “Centipede” y “Missile Command”, también para la Atari 2600.
Ahora solo queda esperar que se va a hacer con los cartuchos, de momento lo único que se sabe es que el documental nos mostrará cómo ha sido toda la búsqueda de los juegos. Se intuye eso sí, que pronto van a empezar a parecer copias de E.T. a precios exorbitantes en sitios de subastas como ebay, a pesar de la mala reputación del juego.
E.T. El extraterrestre: El peor juego de la historia
E.T. el extraterrestre es considerado por muchos el peor juego de la historia, si bien existen muchos títulos que podrían llevarse el dudoso galardón, al juego de Atari no le faltan argumentos para obtener tal denominación, ya que la calidad gráfica y la jugabilidad son suficientemente bajas para ocupar la cima de un imaginario olimpo invertido.
La versión de E.T. para Atari 2600, posee también la dudosa posición de ser el primer juego de la maldición de videojuegos malos basados en películas que se mantuvo por varios años.
La razón de la pobre calidad se debe a que los derechos para desarrollar el juego basado en la exitosa película de Steven Spielberg se negociaron a mediados de 1982, dejando muy poco margen para el desarrollo, ya que los directivos querían aprovechar la navidad de ese mismo año. Howard Scott Warshaw programador del juego, tuvo apenas 5 semanas para diseñar y desarrollar todos los elementos del juego, cuando en esa época eran necesarios al menos 6 meses para lograr algo de calidad.
El juego está compuesto de 6 escenarios conectados entre sí, que supuestamente están basados en ambientes de la película. Cada uno de estos escenarios está poblado de huecos, en los cuales debido a una mala programación de las colisiones y al movimiento constante de la cabeza de E.T., es muy sencillo caer. Una vez que el pequeño extraterrestre cae dentro de un hueco, deberá volar para salir del mismo, sin embargo una vez logrado esto, es muy sencillo caer de nuevo por el problema de las colisiones mencionado anteriormente, creando ciclos constantes de incredulidad y rabia.
Debido a lo frustrante del proceso, el juego se vuelve muy tedioso rápidamente y el jugador tiende a evitar los huecos a toda costa, algo que resulta imposible pues es perseguido continuamente por científicos de la NASA y agentes del FBI que te harán volver a empezar si te agarran.
Para añadir a la frustración, cada movimiento que el jugador realiza, disminuye la energía de la barra de vida, algo desesperante pues al inicio no te queda demasiado claro cuál es el propósito del juego y se pierde mucho tiempo recolectando unas semillas que finalmente no ayudan a lograr nada.
Luego de prueba y error, se aprende que el objetivo de E.T. es encontrar las tres piezas que en conjunto conforman un teléfono que el extraterrestre necesita para llamar a casa y volver con su familia. El problema es que las piezas se encuentran al azar en los huecos que uno desea evitar. La solución a este problema que la mayoría de jugadores encontraron, fue evitar el juego del todo. Por lo que no es extrañar las millones de copias que se quedaron sin vender y su eventual entierro en el desierto.
La polémica y la ley de conservación de mitos
Volviendo a la excavación, muchas piensan que el descubrimiento del juego ha sido demasiado sencillo y conveniente. Sobre todo porque el manejo de medios ha venido precedido por el desarrollo de un documental de parte de Microsoft, que será lanzado en sus servicios de video en exclusiva para Xbox 360 y Xbox One.
Como cuenta Chris Kohler escritor de la revista Wired:
“Existe un tercer grupo de personas, uno que no esperaba: Los puristas de Atari. Los cuales creen que Microsoft, falsificó la excavación. Que no existe manera de los juegos puedan haber sobrevivido tanto tiempo bajo tierra. Otros argumentan que tenía que haber más juegos en el agujero. Y algunos pocos incluso reclaman que el casco sobre la cabeza de Major Nelson ha sido ‘photoshopedo’.”
El mismo Kohler atribuye esta reacción a la "Ley de Conservación de Mitos", que dice que ahora que un mito se ha demostrado cierto, otro mito tiene que reemplazarlo. La teoría de conspiración es difícil de mantener cuando los directivos de Atari, los programadores originales del juego y miles de personas estaban en el sitio y fueron testigos presenciales de la búsqueda y el hallazgo.
ET vuelve a casa
La historia del descubrimiento de las copias de E.T. enterradas hace tres decenas de años en el desierto de Nuevo México es espectacular y ciertamente ayuda a crear expectativa sobre el documental que se encuentran produciendo Microsoft, justo lo que la compañía buscaba.
Sin embargo personalmente creo en la excavación como algo certero. Tal vez, esté siendo un poco iluso, pero me gusta creer que una de las leyendas más prominentes de la historia de los videojuegos, es cierta. Al menos para mi, ET por fin ha vuelto a casa.