Tome nota. La posibilidad de subir de peso es solo uno de los riesgos que andan al acecho en estos tiempos de comilonas navideñas.
Los atracones de tamales, pierna de cerdo, queque de Navidad, “dips” y licor afectan la salud de la persona y la exponen, en el corto plazo, a ciertas enfermedades.
“El cuerpo está adecuado para recibir solo cierta cantidad de alimentos. Cuando ingerimos cantidades exageradas en un solo tiempo de comida, esto puede causar gastritis, colitis y hasta pancreatitis en quienes ya tienen problemas digestivos”, comentó el endocrinólogo Alejandro Cruz.
Además, el consumo abusivo y constante de este tipo de comidas y bebidas aumenta el riesgo de sufrir males crónicos como hipertensión o diabetes.
“Un solo tamal tiene de 400 a 500 calorías. Esto es lo que debería tener una comida completa, pero el tamal no tiene la cantidad de proteínas y vegetales necesaria y, más bien, tiene mucha grasa y carbohidrato. Además, hay gente que se come los tamales de piña en piña y esto empeora el asunto”, apuntó la nutricionista Silvia Quesada.
“Podemos variar la receta y hacerla más sana, es cuestión de no poner el gordito del cerdo o de ponerle pollo, ponerle más vegetales y utilizar grasa vegetal y no la grasa del cerdo. Lo ideal es no comerse más de un tamal por día”, añadió Quesada.
Para esta especialista, el secreto está en preparar las comidas con leche descremada, edulcorante, frutas, vegetales, así como eliminar la grasa visible de las carnes y comer variado, pero con medida.
“Si lo invitan a una cena y no tiene control de lo que se servirá, intente comer mucho más liviano durante todo el día para así disfrutar en la noche, eso sí, sin abusar en las cantidades”, aconsejó Quesada.
¡A moverse! El ejercicio físico es vital para mantener cuerpo y mente sanos, pero en esta época los distintos compromisos sociales hacen que los gimnasios y centros de deporte se vean más vacíos.
Para José Reinhart, especialista en deporte, la gente dice que en esta época no hay tiempo. No obstante, alega que el largo rato que los ticos pasan en los centros comerciales evidencia todo lo contrario.
No obstante, sostuvo que es posible aprovechar la situación para realizar ejercicio.
“Para alcanzar el objetivo, debe programar recorridos dentro del centro comercial sin parar, usar las escaleras normales y no las eléctricas, estacionar más lejos de las tiendas y no usar el ascensor. Todos son ejemplos de cómo practicar actividad física 30 minutos”, explicó.
Problema mayor. Las personas que ya sufren de padecimientos como diabetes o hipertensión no solo deben tomar su tratamiento al día en esta época, sino que también deben cuidarse de forma especial, pues las condiciones de estas personas son más sensibles.
“Este tipo de personas podrían sufrir descompensaciones aunque sigan tomando sus medicamentos, el exceso de grasa y azúcar dañaría sus niveles de salud”, indicó Cruz.
Quesada, por su parte, manifestó que las personas que sufren estos males no solo deben medirse con lo que comen, si no que tambien deben informarse sobre qué tipo de platillos se van a ofrecer cuando son invitadas a una comida navideña fuera de casa.
Para estas personas el ejercicio también es clave, por lo que no pueden descuidarlo. Eso, sí, el ejercicio no es pretexto para darse licencias para comer. En este caso, el que peca y reza, no empata.