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El viejo récord de ocho títulos de ajedrez, en poder de Ricardo Charpentier desde 1959, quedó seriamente amenazado el martes anterior tras la quinta jornada del campeonato nacional de ese deporte.
Bernal González, que también acumula ocho cetros y procura imponer la marca de nueve, se afianzó en la punta tras vencer con piezas negras al veterano exmonarca Juan León Jiménez.
De esta forma, González llegó a cinco puntos en cinco partidas, un inicio perfecto que le permitió tomar distancia de Alexis Murillo, quien marcha en segundo lugar.
Murillo perdió su invicto en esa quinta ronda, al caer con piezas blancas ante Rónald Ugalde.
La derrota dejó a Murillo estancado en 3,5 puntos. Todavía la brecha con el actual monarca no es muy amplia (1,5 unidades) pero por la forma en que está jugando González, recuperar terreno más adelante parece algo difícil.
Tres jugadores están empatados con tres puntos, en el bloque que persigue a Murillo y González.
Se trata de Ugalde, Efrén Solís y Sebastián Ruiz, quienes permanecen a una distancia todavía manejable con respecto de los punteros.
Ninguno posee el título de Maestro Internacional, e incluso por el momento superan a dos de los MI que juegan el torneo, Leonardo Valdés y Francisco Hernández.
Precisamente, la partida de reposición entre estos dos jugadores se reprogramó para el próximo fin de semana. El duelo, correspondiente a la primera ronda, iba a disputarse el pasado lunes.
No obstante, debido a compromisos personales de uno de los jugadores se volvió a posponer, según indicó Gustavo Murillo, uno de los árbitros del campeonato.
Clave. Anoche, al cierre de edición, se disputaba una importante partida entre Murillo y González, que podría decidir mucho acerca del desenlace de esta competencia.
Si Murillo lograba imponerse, volvería a quedar cerca de la opción de pelear por el título. Mas, un triunfo de González significaría un mazazo casi definitivo para anexarse la novena corona.
Al ramonense le quedan en el camino partidas ante Valdés y Hernández, que aparecían dentro del paquete de favoritos pero que dejaron ir puntos valiosos en sus primeros enfrentamientos.
Para la segunda mitad del campeonato también contará mucho la condición física de los 14 ajedrecistas participantes. Estar frente al tablero durante cuatro o más horas diarias, dos semanas seguidas, exige un esfuerzo que podría pasar la factura en las últimas jornadas a quienes no estén preparados.
Es como una vuelta ciclística: también es posible perder en la etapa final por agotamiento.
