Únicamente con jugadores colombianos, el Atlético Nacional de Medellín intentará prolongar la hegemonía cafetera en el joven torneo, y repetir el éxito de 1998 cuando se convirtió en el ganador de la primera versión.
Se presenta con las bajas, sensibles, del meta Miguel Calero y de Néider Morantes (vendidos al futbol mexicano).
Pero el actual campeón de Colombiatiene elementos dignos para tomar en cuenta. Señalemos a Víctor Aristizábal y al joven Tressor Moreno.
El primero se ha visto obligado a cumplir funciones de volante creativo, dada la ausencia de un jugador que ocupe de forma natural ese puesto; el segundo es un delantero hábil y definidor con cualquier pierna o bien de cabeza.
Su compañero de ataque es Darío Muñoz: no es tan habilidoso, pero no se le puede dar un centímetro de cancha porque hace "una trastada" en el marco contrario.
No cuenta con opciones para participar en la próxima edición de la Copa Libertadores y llegará en medio de un receso de 15 días del campeonato nacional de su país.
Es un equipo muy "colombiano" en su estilo de jugar: toca y toca, según aseguró el periodista Manuel Castillo, del rotativo El Tiempo .
Se distingue por su futbol ofensivo, aunque no se defiende muy bien. "Si no ataca se le desbarata el partido. Toca bien el balón y explota muy bien los espacios vacíos".
Juega en el estadio Atanasio Girardot, con capacidad para 50.000 espectadores, y es uno de los más tradicionales del país: se fundó en 1935 con el nombre de Atlético Municipal. Cambió de nombre en 1948, cuando dio el paso al profesionalismo.
En sus vitrinas cuenta con siete títulos nacionales.