Michael Jordan dice que se convenció que debe retirarse

Jordan, que ya se ha retirado dos veces con un porcentaje de convicción del 99,9 por ciento y todo tipo de promesas que no iba a volver a la competición, ahora asegura que todo será diferente y que la décima que le faltaba, justificada en "su gran amor por el deporte del baloncesto", dejará de existir a partir de la próxima primavera, cuando termina la actual temporada regular.

"No tengo ninguna duda de que cumpliré mi último año del contrato de dos que firme con los Wizards en el 2001 y volveré a mi cargo de presidente de operaciones", declaró Jordan al terminar ayer, jueves, los entrenamientos del equipo. "Existen cero posibilidades que vuelva a jugar la temporada del 2003-04".

Nadie conoce cuál ha sido el verdadero motivo del cambio radical que ha tenido Jordan en sus pensamientos sobre su futuro profesional y por lo tanto no hay espacio para "garantizar" que esta vez, a la tercera, sea la retirada de verdad.

Jordan se retiró por primera vez en 1993 después de haber ganado tres títulos consecutivos con los Bulls para dedicarse a jugar al béisbol profesional y volvió la temporada de 1994-95 cuando sólo faltaban 17 partidos para finalizar la competición.

Con su regreso los Bulls volvieron a ser campeones otras tres veces consecutivas hasta que en enero de 1999 dijo por segunda vez que se retiraba, diciendo que "estaba convencido el 99,9 por ciento que no volvería a jugar otra vez". El 19 de enero del 2000 fue nombrado presidente de operaciones de los Wizards.

Jordan utilizó el 0,1 por ciento que le faltaba para recuperar la pasión y la necesidad que tenía de volver a la competición activa y lo hizo al comienzo de la temporada del 2001-02 para terminarla con un promedio de 22,9 puntos, la producción más baja desde su segunda temporada de profesional.

Jordan ha comenzado a aceptar que su aportación al equipo como jugador no va a acelerar la reconstrucción que necesitan los Wizards con los nuevos talentos que hay en su plantilla, e inclusive algunos directivos han comenzado a cuestionar como contraproducente su actitud de presión para que rindan más.

Desde que el año pasado Jordan llegó al equipo, los Wizards ganaron más partidos, pero no estuvieron en la fase final porque se lesionó y se perdió los últimos 20 encuentros.

A pesar de tener una marca de 6-8, Jordan está convencido que los Wizards pueden estar en la fase final del campeonato cuando concluya la primera fase, pero ahora su objetivo es romper la mala racha de cuatro derrotas que tienen acumuladas.

El próximo mes de febrero, Jordan cumplirá 40 años, 14 como profesional de la NBA, incluidos 12 con los Bulls, equipo con el que logró convertirse en la gran estrella del baloncesto mundial al conseguir seis títulos de liga, cinco premios de Jugador Más Valioso y 10 veces líder de los encestadores al finalizar la temporada.

Fuentes de la NBA confirmaron a EFE que Jordan también ha ido perdido el sentimiento y la necesidad que tenía de estar en un campo de baloncesto y competir.

Los últimos asuntos legales, dos demandas relacionadas con su posible relación sentimental con una mujer y la demanda de ésta por cinco millones de dólares tampoco han ayudado a que Jordan se sienta centrado por completo en el baloncesto.

Jordan desea que los jóvenes valores como Kwame Brown, Jared Jeffries, Juan Dixon y Tyronn Lue desarrollen su talento en plenitud, pero no será algo que se logre en cuestión de meses.

Tampoco le gusta el rendimiento que han tenido hasta ahora los fichajes de Jerry Stackhouse, que logró con el traspaso de Richard Hamilton, y los agentes libres Larry Hughes y Bryon Russell.

Ante este panorama, Jordan cree que ha llegado la hora de volver a pensar en ser directivo y accionista minoritario, pero antes tiene que cumplir con cinco meses de competición en los que pueden pasar muchas cosas, entre otras que cambie de nuevo de opinión sobre su posible retirada.

Edición periodística: Gerardo González y Juan Fernando Lara . Fuente: agencias.