Pese a que 4.000 personas llegaron a alentar el sueño de ganar por primera vez un Campeonato Centroamericano Mayor de Baloncesto, Costa Rica perdió ayer la final 74-46 ante Panamá.
Por lo hecho en el torneo, ganando sus partidos de grupo y la semifinal, anoche se encendió la ilusión de quebrar lo que pasó en 2006 y 2007, cuando se perdió las finales ante los aztecas.
Eso sí, queda el consuelo de un boleto al Centrobasket 2016, eliminatorio para el Mundial.
Desde que arrancó el juego Panamá puso las cosas en su lugar con un baloncesto expedito y fuerte, mucho para los ticos.
Y es que los canaleros, tres veces campeones de la región (1999, 2004 y 2015), poseen tres pilares en Trevor Gaskins, José Lloneda y Rubén Garcés. Gaskins es un alero rápido y de mucha penetración; Lloneda y Garces, torres con movilidad y tiro.
Ante ello nada podían hacer Jeffny Anderson, Gabriel Quesada, Andrés Umaña y Daniel Simmons, a quienes el técnico Joshua Erickson rotó para tratar de contener o cansar.
Pronto los canaleros estaban arriba 13-6 y cerraron el período 21-6, denotando que el camino para los ticos sería muy sufrido.
Y así lo fue, a la mitad del segundo período las caras eran de frustración, y no era para menos, pues Panamá lo cerró 33-17.
Del tercer y último cuartos solo queda el esfuerzo local, mas los panameños tenían la victoria.
Contrario a lo previsible del triunfo canalero, la sorpresa del día la dio el quinteto de Nicaragua al vencer 75-71 a México en el partido por la tercera posición.
Cuando la chicharra marcó el final el lugar estalló en júbilo tanto como si hubiera sido propio.
Horas antes de dicho compromiso, en el choque por el quinto lugar, Honduras venció 65-46 a El Salvador, mientras que el único que no jugó, Guatemala, acabó en sétimo y último puesto.