Sidney. AFP La selección de futbol de Uruguay, que en palabras de su centrocampista Álvaro Recoba tenía "derecho divino" para estar en el Mundial de Alemania, quedó hundida tras su derrota de ayer ante Australia.
Recoba, que no pudo hacer el épico partido que pronosticaba, afirmaba antes del encuentro que Uruguay, dos veces campeón del mundo en 1930 y 1950, es un "país grande del futbol, con un gran pasado", que "tiene un derecho divino a jugar el Mundial".
Pero los suramericanos perdieron por 4-2 en los penales.
"Estoy muy apenado, este es el peor momento de mi vida deportiva", declaró el técnico uruguayo, Jorge Fossati, al término del encuentro. "Pido perdón al público europeo por haber fallado en el último escollo. Estoy en paz conmigo mismo, los jugadores lo dieron todo", añadió.
"Todos mis futbolistas jugaron como leones hasta el final", aseguró Fossati, conmocionado. "No estoy en condiciones de analizar este partido de futbol. Me honra haber dirigido a Uruguay pero eso es todo lo que puedo decir".
Uruguay forma parte sin duda de la élite futbolística pero lo cierto es que no ha ganado ninguno de los cuatro partidos que ha jugado en Australia en los últimos 31 años, en los que no anotó ningún gol.
La mayoría de los uruguayos se despertó temprano para ver el partido que comenzó a las 7 a. m. (3 a. m. de Costa Rica) y gran parte de las oficinas públicas y privadas, así como algunos centros de estudios, comenzaron sus actividades luego de finalizado el encuentro.
"Esto es el punto final de algo que se venía arrastrando. Siempre estábamos al borde, teníamos la eliminatoria prácticamente perdida y pasamos al repechaje. De tanto estar al borde, nos caímos", comentó Pablo, estudiante de 25 años.