Panamá (Redacción). Unos 300 aficionados de la barra de la selección panameña Extrema Roja se hicieron presentes a eso de la media noche hora local (11 p. m. de Costa Rica) en las afueras del hotel donde se hospeda la Tricolor.
Cánticos, cornetas, tambores y hasta bombetas fueron parte de la fiesta que montaron los canaleros frente al The Westin Panamá en Costa del Este, para intentar incomodar a los jugadores de la selección de Costa Rica en sus horas de descanso.
Sin embargo, llegar hasta el hotel les llevó casi tres horas, ya que previendo la asistencia de los aficionados la Policía Nacional de Panamá acordonó un perímetro de seguridad de unos 200 metros para impedirles el paso.
Los integrantes de la barra panameña se reunieron a eso de las 9 p.m.