En el Giro de Italia, Andrey Amador terminó de darse cuenta de que sobre la bicicleta es capaz de cualquier cosa y por eso llega a Costa Rica con mucha ilusión.
El cuarto mejor hombre de la edición 98 de la Corsa Rosa no viene de paseo y este mismo sábado se pondrá su uniforme de Movistar Team para salir a entrenar.
Su própósito es repetir la fórmula exitosa que le funcionó para llegar a punto a la ronda italiana, donde solamente lo superaron Alberto Contador (Tinkoff Saxo); Fabio Aru y Mikel Landa (Astana) y por eso, volverá a efectuar una concentración de altura en el Hotel Grandpas, en Cartago.
Amador aún no tiene definido el calendario para el segundo semestre de la temporada y posiblemente, su equipo anunciará la próxima semana la preselección para el Tour de Francia.
Pareciera complicado que el tico acuda a la 'Grande Boucle', pero todo puede pasar y si no acompaña a Nairo Quintana en la ronda francesa, su estancia en Costa Rica podría prolongarse unos días más, porque en principio, su retorno a Europa está programado para finales de este mes.
"No hemos hablado nada del programa, estamos a la espera del próximo calendario, me gustaría un poco como el año pasado, hay varias carreras de una semana tras el Tour", expresó Andrey Amador a través de Giuseppe Acquadro Comunicazione.
Con eso se ratifica que el tico sigue con la ilusión de pelear una carrera por etapas en agosto, mes en el que Movistar Team dirá presente en el Tour de Polonia (2 al 8 de agosto), Vuelta a Burgos (4 al 8 de agosto), Eneco Tour (11 al 16 de agosto) y Tour de l'Ain (11 al 15 de agosto).
Si Andrey alinea en una de esas carreras, al tiempo que seguirá en busca de protagonismo, se prepararía para la Vuelta a España, que será del 22 de agosto al 13 de setiembre.
Y luego vendrá la oportunidad de representar al país en el Mundial de Ciclismo de ruta, en Estados Unidos, cita para la que él mismo consiguió que Costa Rica tenga tres plazas.
"Me voy a concentrar donde estuve antes del Giro, en Cartago, a 1.800 metros. Antes me iba a más altura, 2.500 o 2.600 metros, y me cansaba, había que subir mucho y llegaba un poco pasado. Ahora voy un poco más abajo, con la mente más fresca, con menos exigencia y estoy encantado", apuntó Andrey Amador, el mejor pedalista en la historia del ciclismo de Costa Rica y Centroamérica.