Practicar ciclismo en las calles de Costa Rica se puede convertir en un martirio, pero al momento de decidir una ruta, Cartago aparece como el mejor lugar para entrenar sobre la bicicleta.
La Nación elaboró una lista de las zonas más adecuadas para este deporte y la provincia brumosa cuenta con características que la hacen idónea, según dijeron cuatro especialistas.
Esos especialistas son el exciclista José Adrián Bonilla; Ramón Pendones, director ejecutivo de Aconvivir ( agrupación defensora y promotora de los derechos y deberes de los ciudadanos en carretera); David Gómez, ciclista y fundador de BiciBus (organización que brinda servicio de acompañamiento y asesoría técnica para quienes deseen viajar en bici); y Jonathan Cedeño, fundador de Kickbike (organizador de cleteadas).
Según el criterio de los cuatro, las principales razones para ir a Cartago son:
-Una topografía variada (hay más montaña, pero también se encuentran planos)
-Menor tráfico vehícular
-Buen clima
-Cercanía de San José, por lo que es más fácil llegar
La inseguridad a la que se enfrentan los pedalistas revivió el pasado 29 de enero, cuando tres ciclistas murieron atropellados frente al Walmart de Curridabat. También ha estado en discusión la forma en que deben manejar los ciclistas y los lugares adecuados para practicar este deporte.
En ese último punto, la provincia brumosa es uno de los lugares más buscados y esto incluye varios puntos: Orosi, Pacayas, Turrialba, Tobosi y Tierra Blanca, este último con un nivel de exigencia alto.
"Cartago va a ser el lugar donde la gente tendrá que ir a entrenar en un futuro no muy lejano. Todo va hacia ese lado, porque digamos que todavía está muy virgen", opina José Adrián Bonilla.
Para definir las zonas también se toma en cuenta que hay ciertas restricciones para los ciclistas, como no transitar por carreteras con 80 kilómetros por hora o más.
Por ejemplo, para viajar desde San José a los sitios más recomendados de la provincia cartaginesa, lo mejor sería hacerlo en carro, o bien, ir en bici por la carretera vieja a Tres Ríos y después salir a la pista, en el tramo donde la velocidad es de 60km/h, hasta llegar a la entrada de la Vieja Metrópoli. Desde ese punto lo correcto es ingresar por Taras y después decidir el trayecto deseado.
La vuelta al valle de Orosi se ha convertido en un clásico para los corredores, sobre todo cuando es sábado o domingo, días que toman las calles los pedalistas amateur, que son la mayoría.
"Es el lugar que siento más seguro, aunque a veces también hay inconvenientes", comentó Pendones.
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Para David Gómez, que los ciclistas se agrupen en sectores específicos también hace que los carros deban esperar, se genera menos hostilidad y se respeta al colectivo.
"Esa ruta es muy buena (Orosi). Un domingo estaba dando vuelta al valle y quizás estaban 500 ciclistas, eran grupos y grupos de gente. Al agruparnos, formamos masa crítica y eso solito va a ir resolviendo cosas como querer cerrar algunas calles los domingos", aseguró.
Cedeño concuerda con Gómez sobre la importancia de andar acompañado, pero también por un tema de apoyo.
"En caso de que haya algún tipo de inconveniente, la persona sabe que podemos colaborarle", comentó Cedeño, quien organiza cleteadas los jueves (7 p. m. en el parque España) y los domingos (7 a. m. en el parque Central).
Todos coinciden en que tomar la decisión de dónde ir tiene mucho que ver con los objetivos de cada persona, pero en Cartago también se pueden encontrar planos.
Desde la zona franca hasta Tobosi las cuestas son mínimas y el 85% del terreno es llano.
"En este tramo algunas calles son angostas, pero hay muy poco carro y la gente se ha acostumbrado a que los sábados o incluso entre semana anda gente entrenando o también como medio de tranporte. Históricamente se ha entrenado mucho ahí y hay un poco más de respeto", señaló Bonilla.
Para Gómez, también es importante tomar en cuenta otros consejos, como idear el recorrido previo a salir, para saber las rutas prohibidas y tomar alternas, así como no ingresar a caminos peligrosos.
Si definitivamente la opción de ir a Cartago se hace difícil o simplemente la persona prefiere practicar en otra zona, existen varias sugerencias.
En San José se utiliza la parte de Tarbaca, en Aserrí, pero en este caso es importante tomar en cuenta que las cuestas son demantes, para personas en un nivel avanzado, según explicó Bonilla.
También se puede recorrer del centro de Santa Ana hacia el sur, con la intención de subir hasta Matinilla. Ahí llega un momento en que se acaba el asfalto y los de ruta tienen que devolverse, pero si andan en bicicleta de montaña pueden continuar.
Para Bonilla, San Carlos se asemeja mucho a la Vieja Metrópoli, con pocos carros y terreno ideal. Las rutas más conocidas son desde Florencia hacia La Fortuna o hacia Monterrey.
Siempre en Alajuela, provincia famosa por la cantidad de ciclistas que entrenan, existen muchos lugares donde practican los pedalistas, pero la mayoría son peligroso.
Un buena decisión es salir desde Grecia, por carretera vieja, y a partir de ahí se pueden dirigir hacia San Pedro de Poás, Poasito, Vara Blanca o hacia el volcán Poás.
Finalmente está la zona de Limón, entre Guápiles y Ticabán (Pococí), donde normalmente se realizan carreras de ciclismo. Otras alternativas son en Puerto Viejo de Sarapiquí y entre Limón y Puerto Viejo de Talamanca.
Sin salir a las calles, hay dos opciones más para practicar esta disciplina, siempre tomando en cuenta las metas de cada atleta, las cuales lo guiarán para saber qué le sirve más.
El velódromo ubicado en el Parque de la Paz y el Circuito Grupo Sur en Parque Viva, en La Guácima de Alajuela, representan la oportunidad para practicar de forma segura.
"Recomendamos mucho su uso, lo que pasa es que son circuitos cortos para realizar trabajos específicos", comentó Pendones, de Aconvivir.
Respeto. A la falta de espacios para andar en bicicleta también se une la poca paciencia que existe para compartir la vía, y eso no solo incluye a los ciclistas, también sucede con los peatones.
El respeto parece ser incluso a veces más importante que la infraestructura.
"Lo que no entiendo es por qué la gente se ofusca cuando ve un ciclista, son segundos nada más. Es hasta más fácil adelantar un ciclista que a un carro o una moto. La maniobra de adelantamiento a un ciclista es más segura, más rápida y más fácil de hacer en cualquier lugar", afirma Pendones.
Él y el resto de personas que trabajan con Aconvivir, la cual nació hace diez años, creen que, pese a que todavía falta cultura, se han visto algunos avances en favor del pedalista.
Poco después de que Aconvivir se fundó, consiguieron impulsar el artículo 108 de la Ley de Tránsito, el cual indica que "para adelantar se debe respetar una distancia mínima de un metro cincuenta centímetros (150 cm) entre el vehículo y la bicicleta".
En este punto, es importante señalar que para dar ese espacio, también hay que tener claras otras reglas.
"La ley es escueta, porque mientras un artículo dice que hay que rebasar la bicis a metro y medio, otro dice que no se puede invadir carril contrario cuando la línea es continúa y amarilla, entonces obviamente sí, en ocasiones sucede que un artículo va en contra del otro cuando un carro quiera adelantar a un ciclista. Para no caer en eso, el carro tiene que esperar hasta que la calle sea más ancha", apunta David Góméz, de BiciBus.
Él es conocido entre organizaciones de este tipo como un experto en cuanto a lo que dice la Ley de Tránsito. Gómez asegura que para una mejor convivencia en la calle es fundamental que todos conozcan sus deberes y derechos al transitar.
"Uno como ciclista tiene que darse a respetar pero también ser consciente que si va haciendo presa, tiene que hacerse a un lado en la medida de sus posibilidades".
Para empezar a entender el papel que juega la bici en el entorno, es importante saber que, según la Ley de Tránsito, es un medio de transporte, por lo que funciona como cualquier otro.
"La bicicleta debería ser igual de importante que un carro, pero en este momento no lo es. La legislación está muy en contra de la bicicleta, por el modelo 'carrocentrista' (centrado en el carro) que hemos desarrollado", explica Teo Mezger, de la Organización Movete por tu Ciudad, la cual tiene como objetivo generar conciencia para tener una mejor movilidad en la ciudad, y eso incluye la bicicleta.
En el capítulo V de la ley se señalan obligaciones de los ciclistas (ver animación sobre artículo 119) y del gobierno en este tema.
Según el artículo 118, el Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT) debe crear programas para concientizar a conductores sobre compartir la vía, promover lugares adecuadaos para estacionar bicicletas, incentivar a la ciudadanía para utilizar la bicicleta en zonas de uso exclusivo y habilitar rutas para el desarrollo del ciclismo.
Sin embargo, esto no siempre sucede, e incluso zonas destinadas para las bicicletas, como son el caso de las ciclovías, no son respetadas.
Muchas tienen obstáculos, como postes, y otras son utilizadas como parqueos para automóviles.
"Las ciclovías funcionarán bien en el momento en que se hagan de forma eficiente, que estén conectadas, que tengan sentido y lleven a puntos de interés, recorridos seguros", afirmó Pendones.
Eso sí, es importante aclarar que estos espacios no funcionan para entrenar y solo son zonas de paso para llegar a un destino.
"Los que entrenamos no podemos usar las ciclovías para eso. En ellas se va a otro ritmo y en ocasiones también hay personas caminando", comentó Bonilla.
Aprender a andar en bicicleta
Aconvivir, Movete por tu Ciudad y Bicibus tienen diferentes objetivos, pero todas estas organizaciones promueven el uso de la bicicleta como medio de transporte, lo que genera actividad física, menos contaminación y menos presas.
"La bici es más rápida para los trayectos, más divertida, no genera estrés, más bien lo libera. La bicicleta es deporte, si para llegar a mi casa hago una hora al día ya es parte del deporte. Además es sumamente barato", comenta Teo Mezger, de Movete por tu Ciudad.
Pero para manejar este medio de transporte se deben entender las responsabilidades adquiridas al utilizarlo.
"En ciclismo hay un montón de códigos y cosas que se aplican que ya son como cultura del ciclismo de ruta o montaña, entonces en Bicibus tomamos esas ideas y las ponemos en una especie de servicio de asesoría técnica y servicio de acompañamiento", explica David Gómez.
Para realizar esta tarea, Bicibus se ofrece talleres gratuitos para aprender a manejar en la ciudad.
Según Gómez, esto le ayudará a los pedalistas a conocer la ley, saber reglas básicas de los ciclistas y andar en bicicleta con seguridad y eficiencia.