Los isomorfismos entre la mujer y el fútbol son palpables en la infraestructura misma del deporte. En el rigurosamente conservador Catar (escenario previsto para el Mundial 2022), el diseño de un estadio “en forma de vagina” generó incendiarias polémicas. Se trata del coliseo Al Wakrah, con capacidad para 40 000 personas, y toda suerte de innovaciones térmicas y estructurales. La maqueta es obra del reconocido arquitecto Zaha Hadid. El techo, en efecto, puede evocar una vagina. En realidad, la intención del artista fue rendir homenaje al dhow, embarcación pesquera árabe de velamen triangular y bajo calado. “¿Qué significa esta estupidez? ¿Todo lo que tiene un agujero debe ser considerado vagina?” -alegó el arquitecto-. Pero muchas mujeres se declararon ofendidas por el diseño.