El inicio y el final de la carrera de Austin Berry estuvieron marcados por los colores de los actuales finalistas del Torneo de Verano.
El excarrillero izquierdo debutó en 1989 con Liga Deportiva Alajuelense y 17 años después colgó los botines con Herediano. Incluso, una vez retirado hasta formó parte de diferentes cuerpos técnicos del Team.
Fue compañero de banquillo de Javier Delgado, de Paulo Wanchope y del mismo Carlos Watson en el cuadro herediano.
Austin contó que en su faceta de jugador florense, a mediados de los noventa, vivió una situación particular con Isaac Sasso, para entonces dirigente herediano.
"En la temporada 1995-96 me tocó jugar contra la Liga con un dedo del pie fisurado. El día antes del partido había chocado con Carlos Wanchope en un entrenamiento, para entonces compañero mío en Heredia. Como el partido era ante la Liga, el finado Isaac Sasso me llamó a la oficina que tenía en Tibás y me dijo que si yo era liguista y que si no quería enfrentarme a mi exequipo.
"Al final jugué lesionado y fue uno de mis mejores partidos de la temporada. De ahí que en el siguiente año, Badú pidió que me contrataran a mí y a Harold Wallace".
También recordó que al principio los liguistas le silbaban por el cambio de camisa, empero, ese sentimiento fue pasando. Lo mismo, los heredianos que lo aceptaron como uno más sin diferenciar si venía de Alajuela.
"Fui un jugador muy leal hacia la camiseta herediana, me entregué al 100% y hasta fui capitán de la institución. Cuando jugaba en contra de la Liga al inicio me chiflaban pero ellos en el fondo
sabían que yo era liguista".
Berry pronóstica que la serie final de este Verano se extenderá hasta tiempos extra y, por qué no, a penales. También tiene claro su deseo de quién sea el monarca.
"Soy liguista, fue el equipo donde inicié y me di a conocer. Por eso me inclinó porque la Liga sea el campeón", expresó.