Redacción
El analista arbitral, Greivin Porras, considera que el equipo arbitral echó a la basura el trabajo aceptable que habían realizado durante un juego muy difícil entre Costa Rica y México.
El línea Eric Boria vio pena máxima en una acción de Roy Miller sobre el atacante Oribe Peralta dentro del área y el silbatero Wálter López señaló el punto blanco.
"Sencillamente el árbitro echó a la basura el trabajo aceptable que habia realizado en un juego muy complicado. Él tuvo dos errores muy claros: uno fue el no expulsar a Oribe Peralta por la entrada artera contra Elías Aguilar y la otro el penal inexistente que marcó, fue algo desastroso. El fútbol es de contacto y ahí no juegan mamitas", dijo Porras.
El exárbitro señaló que uno de los puntos que se recalcan en cada capacitación es la inteligencia que se debe tener para encarar cada partido.
"De qué vale saberse al dedillo el reglamento si no se tiene la capacidad de llevar las cosas a la práctica. Marcar el penal fue una tontería, lo que menos hubo fue inteligencia a la hora de interpretar lo que sucedió en esa acción", explicó Porras.
Costa Rica quedó eliminada de la Copa Oro y las semifinales están listas, México enfrentará a Panamá y los Estados Unidos a Jamaica.