El roce internacional es fundamental en cualquier equipo de futbol, sobre todo en aquellos en los cuales sus integrantes están en formación, en un proceso de aprendizaje del abecé del futbol.
Pero la Selección Infantil de Costa Rica (Sub-17 o menores de 17 años) no cuenta con ese rubro en su arsenal, a 13 días de afrontar el primer paso en la clasificatoria al Mundial Corea del Sur 2007.
Se trata de la eliminatoria de la Unión Centroamericana de Futbol (Uncaf), que se realizará en El Salvador del 14 al 22 de octubre.
Se medirá a Guatemala, Panamá, Nicaragua y al cuadro local, en procura de lograr uno de los dos cupos a la fase final de la Concacaf en Honduras y Jamaica. Allí surgirán los cinco clasificados del área a la cita mundialista.
“Retomamos los conceptos y la estructura de juego trabajada a lo largo del proceso. Vamos claros al torneo, pensando en ganar el primer juego ante Guatemala, que es crucial”, estimó anteayer su técnico, Gerardo Puro Ureña.
Pero la exigua cifra de juegos de preparación en las giras a Nicaragua, Panamá y Alemania, preocupó a Ureña.
Sus pupilos dejaron hace un año la división Sub-15 y pasaron a la Sub-17, tras la presencia tica en el Mundial de Perú 2005.
Su incomodidad por el escaso fogueo en el exterior lo hizo reflexionar que la Sele necesita una mayor cantidad de tiempo para evaluar afuera el comportamiento de los jugadores en hoteles, aeropuertos, estadios y sitios de entrenamiento.
“Solo tuvimos estos fogueos internacionales. No está bien. Vamos desarmados a El Salvador. No hay nada más cercano a la competencia que este tipo de juegos, para que haya más igualdad”, comentó Ureña.
Más adelante, el estratega de la Sub-17 reconoció que El Salvador y Panamá se prepararon mejor para la eliminatoria centroamericana.
“Nos llevan ventaja porque han tenido más fogueos”, subrayó.
Torneos. El Puro detalló que El Salvador organizó esta semana la Copa Independencia en varias sedes, para ensayar hacia el Premundial junto a México, Chile y Colombia.
Mientras Honduras recién igualó 2-2 ante los mexicanos, Panamá y El Salvador jugaron en agosto en la Copa del Caribe, que fue ganada por los aztecas.
“Uno pide 50 partidos internacionales en su plan. Ojalá los completemos antes del Mundial”, comentó el entrenador a La Nación .
Recordó que hasta esta semana el grupo se aisló totalmente en el Centro Pastoral Arquidiocesano, en Alajuela. Antes trabajó por etapas, con convocatorias solo cuando habían fogueos de importancia.
“Esta Selección nunca trabajó a tiempo completo sino por bloques. Se dejó que los clubes asumieran los entrenamientos”, insistió.
La delegación costarricense integrada por 20 futbolistas viajará a El Salvador el próximo 11 de octubre, tres días antes del debut ante los chapines. El 16 se mide a los canaleros, el 20 a los nicaragüenses y el 22 a los salvadoreños.
Una semana antes de la salida a tierra cuzcatleca, la Sub-17 sostendrá mañana un colectivo contra el infantil élite de Alajuelense y el miércoles con el de Brujas, en un simulacro parecido al del Premundial, por jugar cada 48 horas.
“El último fogueo con Herediano (ganó 3-2 el jueves) fue muy valioso, por su alta intensidad entre dos equipos ordenados”, concluyó el manejador nacional.