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Sofia Kennin, ranqueada número uno de la Copa del Café, se despidió con lágrimas del torneo, pero no precisamente de tristeza, sino de frustración y enojo, ocasionadas por la sed de gloria de Michaela Gordon.
La candidatura de Kennin se estrelló con el ímpetu y las ganas de trascender de Gordon, sembrada número cuatro, quien ayer aseguró su primer pase a una final en un un torneo grado uno de la ITF, al triunfar 6 a 4, 1 a 6 y 6 a 3.
Desde que arrancó el encuentro la pequeña Sofia dio muestras de que la ansiedad la embargaba y conforme pasaban los minutos el enojo consigo misma fue creciendo, a tal punto que cayó en errores poco comunes para ella y falló puntos sencillos al subir a la red o rematar una jugada.
Desde la grada su padre le pedía calma y le daba ánimos para que tomara mejores decisiones dentro de la cancha, pero la tenista de 16 años estaba bloqueada y ante cada fallo se recriminaba con un grito y un manotazo sobre su muslo izquierdo.
Gordon se aprovechó de eso y en el set definitivo se repuso de un 2 a 0 abajo, ganó cuatro juegos seguidos y dejó en el camino a una Kennin que cometió 22 errores no forzados en el último episodio.
Michaela resaltó su paciencia y no escondió su felicidad por sacar a la favorita y pasar a la final.
“Estoy muy feliz, es mi primera final, así que era un partido muy importante para mí ante una jugadora que acaba de ganar el Orange Bowl . Tuve un buen saque y di buenos golpes, ahora estoy positiva para buscar el campeonato”, dijo la tenista.
Gordon se medirá hoy a la ganadora de la otra semifinal entre Olivia Hauger y Usue Arconada, quienes jugaban ayer por la noche al cierra de edición.
Ruud demoledor. El la primera semifinal masculina no se dieron sorpresas luego de que el noruego Casper Ruud, clasificado número cinco, vapuleara 6 a 0 y 6 a 1 al israelí Yshai Oliel en apenas 50 minutos de partido.
Casper cimentó su victoria en la potencia de su brazo derecho, un cañón que le permitió sentenciar el juego con 36 golpes ganadores y así avanzar a la final de hoy sin mucho desgaste.
“Fue mi mejor partido del torneo, utilicé mi derecha, conecté la pelota con fuerza y corrí mucho. Me siento bien para la final, mis piernas están frescas y conozco a los dos rivales, así que estoy listo”, indicó el noruego.
El otro boleto a la final lo disputaban ayer por la noche Ulises Blanch y Miomir Kecmanovic.
Las finales de la Copa del Café arrancarán hoy a partir de las 4 p. m. con los juegos de dobles masculinos y femeninos.
