Mynor Escoe señaló al cielo, Douglas Sequeira hizo lo mismo para celebrar, el saprissismo recobró la ilusión. Al 48’, con el gol de Escoe, creían lograr la hombrada, pero a partir del minuto 51 todo fue un ridículo.
Saprissa fue paseado por el Santos de México, escuadra que demostró lo limitado que es el plantel que dirige Sequeira, al menos en el plano internacional, y lo masacró con un contundente 6 a 1 para eliminarlo de la Liga de Campeones de la Concacaf.
El gol que concretó Escoe al 48’ fue una gota de agua en el desierto, ya que cuando los morados apenas digerían la igualdad en el marcador, cayó el 2 a 1 a favor de los laguneros y de ahí en adelante fue un cotejo para el olvido.
Aunque no lo parezca, el encuentro no fue lo malo que el resultado refleja para Saprissa, pues el equipo tico mereció mejor suerte en el primer tiempo.
El guardameta Agustín Marchesín la quitó un gol a Daniel Colindres, mientras que los defensores bloquearon dos tiros, uno de Estrada y otro de Colindres, que iban con sello de anotación.
No obstante, al 37’ fueron los verdiblancos los que golpearon primero. Luis Mendoza bailó a Francisco Calvo y centró para que Bryan Rabello rematara sin marca en el segundo palo.
Con la desventaja en el marcador, Sequeira se desesperó en el entretiempo y para la segunda parte colocó a Mynor Escoe y Ulises Segura en el campo; uno de sus peores errores como técnico hasta ahora.
Escoe y Segura no fallaron, pero sí el planteamiento táctico. La S pasó de un 4-1-4-1, sistema ideal para contragolpear, a un 4-3-3, táctica para atacar.
Es cierto, el segundo planteo le permitió llegar al empate rápido, pero mantener el sistema facilitó que el rival le pasara por encima, al punto que al 51’ ya Djaniny Tavares tenía en ventaja al Santos nuevamente.
El 3 a 1 llegó por un error de Gabriel Badilla, quien en salida regaló la pelota y provocó una jugada que concretó el atacante Luis Mendoza, al 54’.
Al minuto 66 los aztecas continuaron con su monólogo del complemento e Izquierdoz cabeceó sin marca para el 4 a 1. Acá otro detalle en el que falló Saprissa y su entrenador, Hansell Arauz subió en muchas ocasiones, pero nunca cumplió con las funciones defensivas del lateral derecho.
Aquella solicitud de principio de temporada que hizo Jeaustin Campos, de traer a un zaguero por derecha, se validó ayer; cuatro de los seis goles llegaron por falta de marca por ese lado.
Con el partido definido, los mexicanos continuaron humillando a los nacionales. En el 68’ Diego González bañó a Danny Carvajal con un centro remate desde la derecha, para marcar el 5 a 1.
Para cerrar, Calvo regaló un gol más, al 90’. Perdió el balón cuando intentaba despejar y Escoboza anotó el sexto.
Saprissa dejó anoche que le pisotearan su nombre con un ridículo mayúsculo en Torreón.