La noticia no sorprendió, era lo esperado. El Comité Ejecutivo definió, por unanimidad, que Toribio Rojas no es el técnico idóneo para buscar la clasificación de Costa Rica al Mundial de Francia 98. Ahora se abocará con urgencia a buscar el sustituto, los planes y los fogueos idóneos.
Tras tres horas de deliberaciones y discusiones, los cinco miembros del directorio presentes en la Federación Costarricense de Futbol acordaron ponerle punto final al proceso que comenzó a mediados de 1994 y finalizó con el rotundo fracaso en el Torneo de la UNCAF, el mes anterior.
"El ciclo de Toribio está concluido. El resultado de la UNCAF pesó en la decisión en un 80 por ciento; en mi opinión no era la persona idónea", anunció el secretario Ricardo Villalobos a las 7:40 p.m., ante miembros de la prensa nacional.
Respaldaron la resolución los directores Carlos Zúñiga, Víctor Rojas, Olman Vargas, el propio Villalobos y Raúl Chacón, quien presentó la moción para la separación de Rojas.
No asistieron a la sesión el presidente Luis Alberto Carranza, por asuntos personales (llegó luego cuando todo estaba resuelto) y el tesorero Eduardo Echeverría, quien se encuentra fuera del país.
Mejores condiciones
Al despedirse a Toribio, el Ejecutivo no quiere nombrar por ahora al sustituto hasta tanto no se garantice que la Selección disfrutará de las condiciones mínimas para afrontar las eliminatorias que arrancan dentro de escasos ocho meses.
Para ello, el directorio solicitó a la Comisión de Selecciones que sugiera un programa que le abra espacio suficiente a los entrenamientos y fogueos fuera del ámbito centroamericano para la tricolor.
Estos planes serán presentados ante los presidentes y representantes de clubes de la Federación durante una asamblea convocada al efecto, el 27 de este mes.
Si se garantiza un buen proceso, la comisión de selecciones presentará dos días después, el 29, la lista de candidados para asumir el cargo de seleccionador. "Si no se garantiza el orden, yo seré el primero en renunciar", anunció Villalobos.
Hasta ahora, dijo, no se ha entrado a analizar las posibles nombres, y los que surgieron hasta ahora "no son oficiales".
Con relación a la indemnización económica que exige Toribio por su destitución, el Ejecutivo integró una comisión para negociar el finiquito, que estará formada por los directores Carlos Zúñiga, Ricardo Villalobos y Raúl Chacón, y que deberá rendir un informe el 15 de enero.
El extécnico exige una suma aproximada a los ¢6 millones, que representa un 20 por ciento de los salarios caídos hasta junio de 1998 --fecha en que expira su contrato--, incluido aguinaldo, vacaciones y cesantía.
Sin embargo, algunos federativos opinan que a Rojas se le puede despedir sin responsabilidad patronal, porque para ellos infringió el convenio al faltarle al respeto a sus superiores, los miembros de la Asambles de Representantes.
"Me quité un peso"
Más que sufrir el desprestigio o la frustración de un fracaso en su gestión, Toribio Rojas afirmó que salió muy fortalecido de su paso como entrenador de la Selección Nacional, un ciclo de año y medio que concluyó ayer en forma amistosa.
Poco después de conocer su despido, el exseleccionador expuso a la prensa que "me quité un peso de encima. Salgo tranquilo, pero siento que con más fortaleza y capacidad para asumir nuevos retos, porque la experiencia fue enriquecedora".
Por su mente pasaron los instantes intermitemtes de su fallido ciclo. El roce ante Italia, las giras a Estados Unidos, Corea y Japón, pero su mayor fracaso, la UNCAF, lo decapitó.
"Soy un triunfador ante las adversidades, como las presiones que se viven en una Selección, pero en ningún momento me sentí frustrado y mucho menos pienso que haya perdido prestigio".
Aceptó con sobriedad el suceso y no dramatizó. "No seré el primero ni el último que despiden. Esto es muy común en Costa Rica, aunque esta vez fue un finiquito de altura."
No profundizó mucho sobre el descalabro, pero sí recalcó que "es urgente luchar con voluntad para reestructurar el sistema; hay buenos elementos y debe darse el ordenamiento, porque de lo contrario es difícil pensar en Francia 98".
Luego confesó que estuvo varias veces cerca de dimitir, pero "no quise dar gusto a las situaciones internas que querían perjudicar mi labor".
"Hice lo posible, pero siento que quedé en deuda con el país. Insisto: nunca se me dieron las condiciones mínimas para trabajar y por eso no se salió adelante."
Toribio externó que espera llegar en los próximos días a un arreglo amistoso con el Comité Ejecutivo, para que le paguen la indemnización que le corresponde por ser despedido.
Aunque no descarta volver a la docencia con el Ministerio de Educación, expresó su deseo de seguir en el futbol. Al respecto dijo que ya recibió ofertas de algunos clubes, aunque no dio nombres; agregó que por ahora se dedicará a descansar con su familia y esperar a ver qué le deparará el destino.
La era de Rojas
Toribio Rojas Gamboa, cesado ayer de sus funciones como seleccionador mayor de Costa Rica, tuvo un rendimiento del 46 por ciento durante el año y medio que permaneció en el cargo.
Sus mejores momentos: La victoria 2 a 1 sobre Estados Unidos, en un amistoso en Tampa, Florida, el 28 de mayo anterior; goles de Farlem Ilama (minuto 10) y Jafet Soto (86'). Y el triunfo 2 a 1 sobre la Sub-23 de Japón, en Sapporo, el 4 de agosto pasado, con dos tantos de Juan Carlos Arguedas (15' y 22').
Sus peores momentos: El cuarto lugar en la Copa de Corea, en junio, cuando perdió 1 a 2 ante Ecuador en semifinales; goleada 0 a 3 contra Japón, en Kyoto, en agosto pasado; y el fracaso en la Copa de la UNCAF, en diciembre pasado en El Salvador, donde ocupó el cuarto puesto y quedó fuera de la Copa de Oro.
Buenas presentaciones: Ante Italia (0 a 1), en New Haven, previo al Mundial 94; Hyundai Tigers de Corea (2 a 1), en diciembre del 94, y la Selección de Río de Janeiro (2 a 0), en Seúl, en junio anterior por la Copa Corea.
Goleadores del proceso: Jafet Soto y Rolando Fonseca, con tres tantos cada uno; J. C. Arguedas, con dos; H. Medford, O. Ramírez, F. Ilama, R. Parks, J. Murillo, A. Madrigal, M. Wright y S. Morales, con uno cada uno.
Balance final: Ganó cinco veces, empató dos y perdió seis, en 13 partidos internacionales en el banquillo tico; con 16 goles a favor y 18 en contra, para un desempeño del 46 por ciento.