Heredia. El Club Sport Herediano le abrió la puerta a un delantero cuyo veneno perdió el efecto letal con el que aniquilaba a sus víctimas.
El Víctor Mambo Núñez que deja el Team por el Real España de Honduras interpretó un papel discreto en el pasado Torneo de Invierno.
El semestre anterior, el artillero registró su cuota más baja de anotaciones en cuatro torneos al concretar solo el 13% de los goles del cuadro rojiamarillo.
Salvo en la semifinal contra Cartaginés, en la que clavó una diana, el ariete no estuvo acertado en juegos de alto calibre.
Núñez se fue en blanco ante Saprissa y Alajuelense cuyas redes se mantuvieron vírgenes ante su acostumbrado acoso.
Las veces que gritó gol lo hizo contra AS Puma, en tres ocasiones, a los blanquiazules les ensartó dos dagas y le marcó uno a Limón y otro a Santos.
Inclusive fuera de casa el delantero solo sacudió los cordeles en el Fello Meza.
Además su presencia en el campo descendió al punto de que fue el décimo segundo futbolista con más minutos en el campo.
De los 17 partidos que disputó salió de cambio en 10 de ellos, una señal de que para el técnico de turno, Jafet Soto, el aporte del Mambo no era tan determinante como lo dictan sus credenciales.
Ayer tras oficializar que va cedido un año al fútbol catracho, Núñez aceptó que el certamen invernal no fue de los más brillantes, pero insistió en que por su aporte en la red sí rindió.
“No sé si tuve un bajonazo porque al final del campeonato terminé anotando y jugando. Tal vez no gané en goles, pero sí en estado físico y mental”, indicó.
Días atrás había reconocido a La Nación que su cuota en el marco rival fue eclipsada por la voracidad con la que anotó su compañero Yendrick Ruiz.
“Él (Ruiz) tuvo un extraordinario torneo; hizo 15 goles. Yo, a pesar de que jugué poco, hice lo mío”, subrayó.
Por su parte, el gerente deportivo del club, Jafet Soto, justificó el préstamo del atacante en que quería militar afuera antes de ponerle punto final a su carrera.
Y agradeció el aporte del jugador que llegó al club desde el Invierno 2010.
“Nos duele a todos los heredianos, pero esto lo hacemos porque él se lo merece ya que nos ha dado mucho”, indicó Soto.
Para Orlando Moreira, vicepresidente de Fuerza Rojiamarilla, la salida del futbolista responde a la insistencia del jugador por aprovechar una oportunidad en el exterior y no en un rendimiento deportivo específico.
Menos voraz. Tres hombres de riñón herediano, consultados por este diario, manifestaron que el rendimiento exhibido por el Mambo es producto de que está en una fase madura.
“Él es un goleador, pero todos sabemos que conforme pasan los años el rendimiento del jugador no es igual. Herediano pierde un líder en el camerino y un hombre que en cualquier momento marca diferencia en el campo”, opinó Allan Oviedo, exdelantero del cuadro florense.
Para Orlando De León, quien dirigió a Núñez en su primer capítulo con el Team , “Mambo es un ganador, no le gusta que lo saquen, y quizás al ver que ya jugaba poco no se sentía a gusto”.
Marvin Obando, exlateral rojiamarillo, apuntó que “Víctor no está acabado, por algo es el goleador. Eso sí, ya no es el mismo de años atrás por edad, pero todavía tiene para dar más allá en Honduras”.