Analiza. Camina por la gramilla. Se detiene, cierra sus ojos, se lleva las manos a su cabeza y sufre.
Mientras tanto, en la gradería norte, los jugadores tienen una reunión para tomar un poco más de fuerza y así “asimilar el golpe”.
Abajo, en las sombras del Lito Pérez, el resto del cuerpo técnico, comandado por Luis Diego Arnáez mantiene un sepulcral silencio.
Claramente no hay espacio para las bromas normales del día a día.
Todos ellos y la afición misma mantienen una gran pregunta en sus cabezas: ¿qué va a pasar con Puntarenas FC en la Liga de Ascenso? ¿Tendrá el mismo camino que el agónico Municipal Puntarenas?
Sin rastro. Mientras que Arnáez convocó a sus jugadores para darse apoyo mutuo y definir un poco el futuro de todos, el rastro de la presidenta Alejandra Ordoñez se mantuvo en un completo misterio.
A todo el plantel se le acabó el contrato, pues al perder la categoría a todos habrá que hacerles nuevos contratos, de ahí la gran incertidumbre del equipo.
“En los próximos días me reuniré con la presidenta para darle mi punto de vista sobre lo que yo viví aquí. La idea de traer a los jugadores aquí es ayudarles para que esto no los frustre de por vida, pues es muy duro”, indicó el técnico Arnáez, quien es porteño de nacimiento y quien aún no sabe si seguirá al frente del equipo.
Mientras jugadores como Yashin Bosque y Roberto Wong firmaron fidelidad al equipo y afirman que lo acompañarían en la Liga de Ascenso, otros como el argentino Luciano Bostal ven difícilmente su permanencia de no darse cambios.
“La dirigencia aún no se ha acercado a hablar, así que ahora solo queda descansar”, indicó Bostal.
De momento, Marco Espinach, vocero del Puntarenas FC, indicó que Ordoñez definirá el futuro, más en frío en los próximos días, por ahora solo quiere descansar.