El fútbol electrizante por la banda derecha de Pablo Herrera fue anoche el arma principal del Cartaginés para sacar un valioso pero duro triunfo ante el Isidro Metapán de El Salvador, por la Liga de Campeones de la Concacaf.
La velocidad de Herrera fue la antorcha de guerra que guió al Cartaginés a dar un golpe de autoridad al lograr un triplete y sacar así de un embrollo al cuadro brumoso.
El Pecas abrió el marcador cuando Cartago dominaba a placer dentro de la cancha y más tarde, cuando les llegó el agua al cuello, él mismo cerró la victoria 4-2.
Los tres puntos le permiten al cuadro blanquiazul regresar con el pie derecho a la Concacaf, tras 16 años sin hacerlo; además, mandan un claro mensaje al Galaxy de Los Ángeles: Cartago quiere el primer lugar y pasar a la siguiente fase.
Apoyo. Al partido le costó carburar, fuera por respeto de ambos equipos o bien por esperar lo que cada uno pudiera presentar.
Desde antes el juego se catalogó como vital para ambos equipos, pues ninguno piensa ceder terreno ante el Galaxy, denominado favorito a ganar el grupo.
Esa tal vez pudo ser la explicación para unos primeros minutos aburridos y con poca profundidad.
Pero Cartaginés encontró en el apoyo de sus volantes la fórmula para ganar terreno, acercarse al área y generar peligro.
Lo que no encontró en los primeros 45 minutos de dominio lo hizo en solo cinco de ellos, eso sí, tras seis oportunidades claras mandadas a la basura por los brumosos.
Primero fue Terencio Neto de Oliveira con un cabezazo por encima, luego Randall Chiqui Brenes, seguido de Danny Fonseca, Félix Montoya y el mismo Herrera.
Este último fue el mejor de la cancha ayer, por aporte, por entrega y por salvarle el viaje al Cartaginés. Él mismo fue el encargado de abrir el marcador al minuto 40.
Cansado de lanzar centros al área que Neto no supo aprovechar, Herrera sacó un riflazo a contrarremate para poner el 1-0.
Pero en el Cartaginés, el requisito es sufrir y ayer ante el Metapán no fue la excepción.
Con poca proyección en el área, el Metapán empató tan solo en la primera opción que tuvo gracias a un autogol de Esteban Sirias que cerró un centro en el área, imposible para Wardy Alfaro.
Andrés Flores “arregló “ el error antes del descanso aprovechando un claro descuido en el área por parte de la defensa salvadoreña.
Variantes. Las variantes de Eliseo Quintanilla en el Metapán y Paolo Cardozo en Cartaginés cambiaron la historia del compromiso.
Primero, el Cheyo llegó a darle dinámica al mediocampo de los Jaguares. En sus pies nació el gol del empate por parte del panameño Nicolás Muñoz, al 55’.
Javier Delgado contestó con el cambio del uruguayo Cardozo, amuleto de la suerte, pues dio control en el mediocampo y generó espacios por la banda para que Herrera rematara un juego que por momentos se quiso complicar.
Esta crónica se hizo con base en la transmisión de Repretel, canal 4.