Alajuela. De la selección de Zambia se sabe poco o nada.
El papel dice que son el integrante más débil del grupo A, pero más grandes sorpresas se dieron en la historia del fútbol.
A eso apunta su técnico, Albert Moolosi Kachinga.
“Estamos jugando por primera vez en un torneo importante, aún así nuestras metas son altas y venimos a cumplirlas”, dijo con rapidez, pues quería que su equipo llegara al hotel cuanto antes.
“El sueño de todo entrenador es llegar largo. Y si logramos superar la primera fase, podemos comenzar a soñar”, dijo Kachinga.
Las africanas estuvieron las últimas dos semanas entrenando en Estados Unidos, adonde asegura que pulieron todos los detalles que les hacían falta para estar listos.
Aparte, si es por apariencia, Zambia al parecer no será un oponente sencillo. Al salir del aeropuerto Juan Santamaría anoche, a eso de las 8:30 p. m., quedó claro que muchas de las jóvenes que vinieron a disputar el Mundial Femenino Sub-17 son altas y robustas.
Las zambianas jugarán el sábado a las 5 p. m. en el Estadio Nacional ante Italia, en el partido preliminar del Costa Rica-Venezuela.
Ante las ticas jugarán el 22 de marzo en el Estadio Ricardo Saprissa, la sede de Tibás.