Las autoridades que investigan el accidente suponen que el fallecido, un esquiador cuya identidad aún no ha sido facilitada, provocó el mismo la avalancha en la estación de deportes alpinos que hay junto a la localidad de Garmisch, donde cada 1 de enero se celebra una famosa competición de saltos.
A pesar del frío glacial que reinaba esta mañana en el lugar, situado a 2.628 metros de altitud, la estación de esquí registró un gran número de visitantes, ya que el peligro de aludes, situado en el nivel 3 -el máximo es el 5- se había atenuado por primera vez después de varios días de alerta.
El alud se produjo sobre las 14.00 horas en una cumbre y partes de las masas de nieve desprendidas llegaron hasta las pistas del recinto de la estación deportiva, señaló la misma fuente.
La Policía puso en marcha un equipo de rescate compuesto por ocho guías de montaña, un helicóptero y un perro para buscar a los posibles desaparecidos, hasta que encontraron a este primer cadáver.