Ariana Rahmanparast es la única tenista costarricense que se mantiene con vida en el torneo de tenis Copa del Café 2013.
La nacional impuso su estilo de jugar al deporte blanco ayer sobre la cancha principal del Costa Rica Country Club, pasadas las 10 a. m.
Rahmanparast arrebató a la mexicana Regina Clark la posibilidad de continuar en el certamen.
“Estoy bastante feliz. Jugué bien y solo hice lo que tenía que hacer”, contó la joven, quien reside en Estados Unidos.
Aunque los nervios la amenazaron durante los primeros minutos del partido, ella supo vencerlos y se posicionó con buen ataque.
La representante costarricense venció con parciales de 6-4 y 6-3.
Mientras, hasta el cierre de esta nota, la local Juli Raventós buscaba visar su boleto a la otra ronda.
Raventós disputaba un partido con la peruana Patricia Panta.
Por fuera. Las otras cinco locales que lograron un cupo en la lista quedaron eliminadas.
De esta manera Kristel Altmann, Nikole Skaf, Eugenia Camacho, Nathalie Skaf y Juli Raventós concluyeron su participación.
Ellas estrenaron el torneo en su inicio oficial y desde las 8:30 a. m. y por dos horas disputaron su continuidad con tenistas foráneas.
Participantes de Bielorusia, República Dominicana, Estados Unidos y Perú dejaron sin posibilidades a las nacionales.
Por ejemplo, Kristel Altmann cayó 2-0 ante Anita Safronenka, de Bielorusia. Ellas terminaron con dos parciales de 6-0.
Karla Portalatin, de República Dominicana, también le marcó un 2-0 a Nicole Skaf, con 6-2 y 6-1.
“Es un evento difícil. Aquí están los mejores tenistas juveniles de todo el mundo. Quien pierda un partido queda por fuera”, manifestó Kenneth Thome, organizador.
Lo anterior debido a que el torneo se disputa en llaves. Las de ayer fueron de 64 hombres y 64 mujeres y solo pasaron 32 de cada uno.
Esa es la dinámica a seguir hasta el 6 de enero, día en que se conocerá los reyes de ese torneo.
En la tarde los siete hombres costarricenses comenzaron, en la misma arena, su lucha por avanzar a las rondas siguientes.