Cuando las falencias son continúas y el juego colectivo apenas si aparece a cuenta gotas, es cuando debe prevalecer el coraje. La Tricolor apeló a ese carácter de los juveniles para sobreponerse a las limitaciones en el funcionamiento y alcanzar el boleto al Mundial.
Esa muestra de agallas, sumada a la inspiración de Rándall Leal en momentos claves, fueron determinantes para sellar el boleto a Corea del Sur, después de un Premundial agrio y deslucido para la Sele.
El equipo Sub-20 confirmó su pobre desempeño frente a Panamá, en un duelo que sacó a pura lucha y concentración, ante la falta de control en el mediocampo, la poca cohesión entre las líneas y la ausencia de sociedades en el ataque.
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La falta de fluidez en el juego lo obligó a replegarse atrás durante todo el segundo tiempo, de total dominio canalero. El nerviosismo, que se incrementó con las malas salidas del arquero Mario Sequeira, estuvieron a punto de robarle la clasificación a la Nacional.
Al final, un empate le permite a Costa Rica celebrar y de paso reflexionar sobre todo lo que tendrá que mejorar a las puertas de la cita mundial.
En la inicial, el cambio en el libreto de Marcelo Herrera le redujo los espacios a Panamá, con dos líneas que en un principio lucieron compactas, pero que luego empezaron a sufrir e para controlar el balón y tener un tránsito fluido en la media.
Fue en esos primeros minutos que la Sele llevó el peso del duelo, pero luego todo cambió.
La dinámica de la Sub-20 le permitió controlar los tiempos del duelo, con Leal como eje fundamental en la generación.
Esta vez, la eficacia no fue un problema, ya que el propio Leal se encargó de rematar desde fuera del área, tras de un cobro de tiro libre, para darle la ventaja a la Tricolor al minuto 9'.
Sin embargo, el gol despertó a la escuadra canalera, que adelantó líneas en busca del milagro, frente a un adversario que le entregó la iniciativa, perdió la posesión de la redonda y se excedió en los trazos largos.
Panamá lograría el empate al 57', obra de Isidoro Hinestroza, que se aprovechó de la mala marca de Esteban Espinoza y la salida tardía de Sequeira.
Costa Rica jugó al borde del precipicio en el cierre, con una zaga mucho más concentrada y fina que en los últimos partidos, pero sin claridad en la medular.
Fueron vitales Pablo Arboine en las coberturas y Esteban González en los cortes para evitar la debacle del arco nacional.
La tónica se repitió durante casi todo el resto del cotejo, con las arremetidas canaleras en el último cuarto de cancha y la pelea de los zagueros ticos para reventar la pelota y evitar el peligro. Costa Rica se sostuvo para aferrarse al Mundial y garantizar la presencia tica en Corea.
Alineaciones
Costa Rica: Mario Sequeira, Pablo Arboine, Esteban González, Luis Hernández, Kevin Masis, Randall Leal, Juan Arguedas, Esteban Espinoza, Bernald Alfaro, Jostin Daly y Eduardo Juárez.
Panamá: Charles Taylor, Andrés Andrade, Céscar Blackman, Ricardo Ávila, Javier Rivera, Cristian Martínez, Andrés Peñalba, Justin Simons, José Tejeda, Isidro Hinestroza y Josué Vergara.