Cuando no se hilvana juego en el mediocampo, ni se tiene la habilidad para salir jugando desde atrás, es difícil competir. Ante esta realidad se enfrenta Costa Rica, incapaz de, al menos, inquietar a Irán, un adversario muy superior en todas las facetas de juego: En la creación, las transiciones y la ejecución de la última jugada.
La Tricolor se despidió de la Copa del Mundo por la puerta atrás, al quedar eliminado en la primera fase y sin dar argumentos que reflejen mejoría. Desde el primer enfrentamiento ante Alemania hasta ayer frente a Irán, el equipo exageró el juego largo, lo que limitó los ataques y diezmó la presencia de Andrés Gómez, el mejor en la cancha.
No hubo cohesión entre los hombres de retaguardia y el mediocampo y los centrales mostraron nula claridad para conducir la pelota y darle salida al plantel. La poca tenencia del balón de los volantes también impidió que el equipo consiguiera elaborar y fabricar con frecuencia ocasiones de peligro.
A la media hora de partido ya el duelo estaba 2 por 0 en contra para la Nacional. Dos penales, el primero muy drástico y el siguiente más que evidente, pusieron a la Tricolor contra la pared. Ghobeishavi al 25' y Shariati al 29' anotaron para los iraníes, que mostraron una fluidez marcada con la pelota.
En el segundo periodo, el equipo infantil mostró una mejoría, cuando el timonel Breansse Camacho hizo ingresar a José Rodolfo Alfaro, el futbolista de la Sele con más capacidad para sostener la redonda y generar juego.
Ante las limitantes de la Sub-17 para elaborar, fue llamativo que el estratega patrio decidiera dejar en el banquillo a Alfaro, que al menos cuando ingresó tuvo la intención de proyectar al equipo.
Aún cuando Irán fue superior por varios lapsos y por otros no metió el acelerador, la Tricolor tuvo más personalidad al conducir la pelota de pie a pie.
Luego de dos intervenciones de Ricardo Montenegro, la Nacional tuvo la más clara, cuando Yexy Jarquín le colocó la pelota a Jurgen Cordero, quien desaprovechó la acción al rematar por fuera, cuando ya el arquero estaba vencido.
En el cierre del duelo, una desatención de la zaga, que quedó muy expuesta, fue aprovechada por Sardari, que se sacó la marca del arquero Montenegro y anotó el tercero para Irán.
La Sele se despidió del Mundial de India con una goleada y muchas dudas sobre la mesa. El equipo parece tener individualidades como Alfaro, Gómez y el propio Josué Abarca, que ante Irán ni siquiera jugó, pero al final abandonó la Copa del Mundo mostrando muy poco en el funcionamiento colectivo.
Montenegro fue, sin duda, el futbolista con mejor rendimiento, al impedir que su arco fuera superado con más frecuencia, tras los yerros de la zaga y el poco control del equipo.
La Sub-17 perdió 2 por 1 ante Alemania, luego igualó a dos frente a Guinea y cayó 3 por 0 ante Irán.
Costa Rica: R. Montenegro, F. Faerrón, K. Arce, A. Arias, W. Cortés, J. Cordero, A. Gómez, Y. Jarquín (M. Mora), S. Castro (J. Alfaro, al 45´), A. Román (F. Flores), D. Chacón.
Irán: A. Gholam Zadeh, A.Satavi, A. Jalali, A. Esmaeilzadeh (Namdari, al 45'), T. Shariati, A. Hossein, A. Sayyad, M. Ghobeishavi, Y. Delfi (M. Nasiri, al 45'), A. Davaran, S. Khaghani (M.Sardari, al 72').