Karen Matamoros ocultó las muecas del dolor, pese a que su pierna izquierda era un “mapa” de raspones.
Pudo más el júbilo de saberse bicampeona de la Vuelta Femenina a Costa Rica. Por eso ofreció la mejor sonrisa al explicar detalles de su brillante exhibición en todas las etapas de esta competencia.
“Tengo que resaltar el trabajo de mi equipo, fue vital el apoyo de las compañeras. También fue importante la preparación que diseñaron los entrenadores Albin y Andrés Brenes”, explicó.
Este ha sido un gran año para Karen, quien ganó en los Panamericanos de ciclismo de montaña en Colombia un boleto para las Olimpiadas.
Por su parte, Roxana Alvarado, la ganadora de la etapa, experimentó un triunfo de sabor agridulce.
Pese a su alegría por haberse dejado la bandera a cuadros, Roxana lamentó que su victoria se diera luego de la caída masiva antes de la meta.
“Esta no es la manera de ganar. Luché mucho por conseguir este triunfo, pero ojalá nadie se hubiera caído”, reconoció con sinceridad.