EscucharRío de Janeiro, 1 ene (EFE).- Un apagón dejó hoy sin el servicio de energía eléctrica durante unos 40 minutos del primer día de 2005 a los 17 millones de habitantes de los estados de Río de Janeiro y Espíritu Santo, en el sudeste de Brasil, según fuentes oficiales.
El apagón afectó a los dos estados vecinos, que concentran cerca del 10 por ciento de la población brasileña, a partir de las 18.30 hora local (20.30 GMT), según portavoces del oficial Operador Nacional del Sistema Eléctrico (ONS).
El servicio comenzó a ser restablecido gradualmente cuarenta minutos después, aunque varios barrios de Río de Janeiro continuaban a oscuras cerca de una hora después del apagón.
El servicio tampoco había sido restablecido en Espíritu Santo, el menor de ambos estados y con 3 millones de habitantes.
Los técnicos del ONS atribuyeron la falla eléctrica a un corto en una línea de transmisión de energía utilizada por la generadora Furnas, la mayor del país.
La línea averiada transmite la energía generada por la hidroeléctrica de Itaipú, en la frontera con Paraguay y la mayor de su tipo en el mundo, hasta las centrales de las empresas que distribuyen energía en Río de Janeiro y Espíritu Santo.
El corte de energía obligó a las autoridades a cerrar las estaciones del metro y a evacuar a los pasajeros que estaban en ese momento en los vagones.
Los hospitales funcionarios provisionalmente gracias a sus propias plantes de generación de energía, en tanto que los dos aeropuertos de Río de Janeiro suspendieron los vuelos temporalmente.
Pese al reducido tránsito de vehículos en el primer día del año, la falta de luz dejó a Río de Janeiro sin semáforos y provocó varios embotellamientos.
En septiembre pasado, una falla en el suministro eléctrico dejó sin luz por cerca de una hora a los nueve estados del nordeste del país, que tienen una población de casi 47 millones de personas.
En enero de 2002 un apagón afectó a los diez estados más poblados de Brasil y dejó sin luz durante horas a 110 millones de personas.
Entonces, las autoridades atribuyeron el apagón a la fragilidad del sistema eléctrico por la falta de inversiones, la misma causa por la que el país pasó casi un año con la luz racionada entre 2001 y 2002. EFE
cm/cw
