Las principales bolsas de América Latina se afirmaron en el terreno positivo en el comienzo de diciembre, alentadas por las señales de confianza de los inversores extranjeros en los mercados emergentes y en medio de las constantes bajadas del dólar.
Los mercados de la región mostraron optimismo al entrar en la recta final del año y terminaron la semana con ganancias generalizadas, apoyadas en la tranquilidad del escenario internacional y en algunos factores internos.
En opinión de los analistas, las recientes bajas de los precios internacionales del petróleo, la caída en picado del dólar en los mercados mundiales y los datos positivos de economías como la brasileña han favorecido a las bolsas latinoamericanas.
La percepción de los especialistas es que la debilidad del dólar hizo que los inversores extranjeros reduzcan su apetito por los activos estadounidenses y vuelvan sus ojos sobre los países emergentes en busca de más rendimiento para sus capitales. Ese movimiento es más acentuado en Brasil, afirmaron los analistas de mercados bursátiles.