La bolsa estadounidense mostró cautela la semana pasada, en medio de preocupaciones provocadas por indicadores económicos reducidos, que impulsaron a los inversionistas a tomar beneficios para preservar las ganancias obtenidas en los últimos meses.
“Habíamos avanzado tanto desde mediados de marzo, que es duro seguir progresando a medida que se acerca el fin de año”, declaró John Hughes, uno de los analistas de la firma Shields and Company.
Hay mucho más interés en proteger los beneficios tras ese desempeño, que en correr riesgos, destacó el analista.
Hugh Johnson, estratega del banco First Albany, consideró que los inversionistas se preocupan por ciertos aspectos de la economía cuando ven subir los precios de las obligaciones y bajar los precios de los valores bursátiles.
Estadísticas publicadas durante el transcurso de la semana anterior mostraron que la producción industrial progresó menos de lo esperado y que las demandas de ayudas por desempleo aumentaron.
Al mismo tiempo, el déficit comercial estadounidense siguió profundizándose, y el aumento de los precios de la producción superó lo esperado.