Los operadores se marcharon el pasado fin de semana más inquietos por posibles alteraciones en el fluir de suministros hacia Estados Unidos, lo que llevó al crudo de petróleo intermedio de Texas a alcanzar nuevos máximos.
El precio de los contratos para noviembre finalizó la semana con un máximo histórico de $53,31 el barril, lo que supone un encarecimiento de un 6,3% en tan solo la última semana.
El petróleo Brent también registró un nuevo máximo en Londres, y los contratos para noviembre terminaron la semana a $49,71.
La inestabilidad en Nigeria, donde está previsto que hoy se inicie una huelga general que podría afectar a la producción y las exportaciones desde ese país, añadió una nota más de preocupación en un escenario ya de por sí tenso por la relación entre oferta y demanda.
Los expertos consideran que, factores geopolíticos, como en el caso nigeriano, pueden influir a corto plazo en un incremento de los precios, pero las razones de la fuerte y prolongada tendencia alcista obedecen a los fundamentos propios del mercado.
“El equilibrio muy ajustado entre demanda mundial y oferta es lo que aumenta el efecto que estos factores tienen en los precios del crudo”, señaló la Agencia de Información de Energía (EIA) en su informe semanal.
Esta entidad estima que el crecimiento en la demanda mundial de petróleo para este año será de 2,6 millones de barriles diarios, o un 3,3% por encima del nivel de 2003.
La demanda total de petróleo y otros combustibles durante este año se situará en Estados Unidos en un promedio de 20,4 millones de barriles diarios, 1,9% más que el año previo.
Se prevé, sin embargo, que el crecimiento en el consumo será algo más bajo en 2005, debido a una menor avance de la economía y a los elevados precios del crudo y de otros productos derivados.
Frente al sólido tirón del consumo, los países productores bombean crudo casi al límite de su capacidad, lo que deja un escaso “colchón” extra para compensar interrupciones imprevistas. La producción de los países que integran la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) alcanzó en setiembre 30 millones de barriles diarios.