Mayor seguridad al comprar y procesos de pago más rápidos, son dos de las ventajas que ofrecen las tecnologías que empiezan a integrar las tarjetas de crédito y débito que circulan en Costa Rica.
Se trata de la incorporación de un chip incrustado en el frente de la tarjeta que se añade al uso de la banda magnética, ubicada en la parte posterior del plástico. En ambos sitios están guardados el número de cuenta, el número de cédula del cliente y la fecha de vencimiento del plástico.
La diferencia entre las dos tecnologías es que la banda magnética emplea un cruce de variables fijas (por ejemplo, el número de cuenta y de cédula) como mecanismo de seguridad al comprar. El chip tambien cruza estas variables, pero agrega un algoritmo que varía cada vez que se hace una transacción (similar al sistema de token que emplea en la banca digital), lo cual eleva la seguridad de la compra.
La otra tecnología que adoptarán las tarjetas se llama contactless (sin contacto), que consiste en una antena diminuta que se inserta en el plástico. Con ello, el usuario de tarjeta solo tiene que acercarse a la pantalla del datáfono (equipado con esta tecnología), en vez de deslizarla por una ranura.
Citibank y el BAC San José fueron los primeros en introducir esta nueva generación de tarjetas en marzo y abril del 2013, mientras el Banco Lafise se incorporó al grupo el pasado mes de mayo.
Así lo comprobó un sondeo realizado por La Nación entre 12 bancos comerciales. De ellos, 10 respondieron a la consulta. La transición hacia ambas tecnologías será paralela en algunos casos y en otros se dará en una segunda fase.
Omar Jiménez, gerente de comercios afiliados de Credomatic, explicó que hoy un 30% de sus tarjetas ya incorporan el chip y cuentan con la tecnología sin contacto.
Por su parte, el 40% de las tarjetas de crédito de Citibank ya migraron al sistema. “Estamos con la implementación en las de débito para el segundo semestre del año”, dijo German Roson, director de Productos Banca de Consumo de Citibank.
Mientras, Maycol Fallas, gerente de Tarjetas de Crédito de Banco Lafise, dijo que unas 500 tarjetas con chip ya circulan en la calle y aclaró que la tecnología contactless será parte de una segunda etapa.
A partir de julio, el Banco de Costa Rica (BCR) y Scotiabank empezarán a circular las tarjetas con ambas tecnologías y el Banco Promérica y el Banco Nacional lo harán a finales del año. En octubre, el Banco Popular dará el salto solo por las tarjetas con chip y Bancrédito esperará al 2015. Bansol esperará a que la red de datáfonos sea mayor.
Más seguridad. En Costa Rica circulaban 7.473.561 tarjetas (5.581.862 de débito y 1.891.699 de crédito) a fines de 2013, según datos del Banco Central. Las compras son su principal uso y si solo se contabiliza este rubro, los tarjetahabientes pagaron un equivalente al 17,2% del PIB el año pasado.
La migración hacia las tarjetas con chip es impulsada por las marcas Visa, American Express y Mastercard para reducir el fraude porque la banda magnética es clonable. Un informe de la Reserva Federal de Inglaterra, divulgado por CNN, revela que el fraude con tarjetas de crédito se desplomó 34% en los seis años siguientes a que los bancos y los comerciantes adoptaron las tarjetas con el dispositivo.
Empero, la banda magnética se mantendrá como parte del plástico porque no todos los comercios en el país y el mundo contarán con la nueva tecnología.
Hoy día, un 50% de los datáfonos de Credomatic están diseñados para leer las tarjetas con chip, y aquellos de tecnología sin contacto solo se están distribuyendo en centros comerciales. Omar Jiménez destacó que la idea del contactless es agilizar los lugares de alto tránsito.
Por otra parte, Marco Vinicio Calderón, director de Medios Electrónicos de Pago del Banco Nacional, dijo que la tecnología sin contacto servirá para agilizar servicios como transporte. Por ello, la meta de la entidad será colocar esta nueva generación de tarjetas en estos segmentos.