Las familias en Costa Rica incrementaron el consumo de hortalizas y verduras entre 2009 y 2013, de acuerdo con los resultados de un estudio de tendencias presentado ayer por el Programa Integral de Mercadeo Agropecuario (PIMA).
Esta es la entidad que administra el Centro Nacional de Abastecimiento y Distribución de Alimentos (Cenada).
Según el análisis, que se realiza mediante encuestas, el consumo de hortalizas pasó de 100 kilos por persona al año en el periodo 2009, a 116 kilos en el 2012-2013.
En el caso de las frutas, la tendencia creció de 136 kilos por persona al año a 155,8 kilos en ese mismo lapso.
Preferencias. La naranja es la fruta preferida, de la cual cada persona consume 23,2 kilos anualmente, mientras el banano es segundo, con 22,8 kilos por año. Siguen otros como piña, papaya y sandía.
La papa, con 20,8 kilos por personal al año, es el favorito de los consumidores entre las hortalizas. Le sigue el tomate con 19,9 kilos. Luego el repollo, chayote y zanahoria.
El estudio Tendencias de consumo de frutas, hortalizas, pescado y mariscos se desarrolla en centros educativos, donde los estudiantes llenan un formulario bajo supervisión de los padres o encargados. Para el último sondeo se escogió una muestra de 52 centros educativos, con grupos de 30 alumnos en promedio cada uno.
La investigación se realiza desde hace 10 años y su metodología es avalada por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Pescado y mariscos. Un 56% de los encuestados indicó que consumió mariscos la semana anterior a la realización de la encuesta, contra un 53% de los resultados del 2009.
Al comparar los dos periodos, el consumo de variedades de pescado (atún, corvina, dorado, tilapia y otras) se incrementó de 5,3 kilos por persona al año, a 7 kilos por persona. El de otras variedades (pulpo, camarón, calamar, langosta, chucheca y otros) subió de 2,1 kilos a 3,1 kilos por persona cada año.
Rodrigo Li Guzmán, gerente general del PIMA-Cenada, explicó que el aumento en el consumo de estos productos fue propiciado por los programas de educación que fomentan una alimentación sana, así como por el decreto del 2011, que obliga a las sodas escolares a vender frutas y vegetales frescos.