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El Gobierno prohibió la adición de otros productos como regalía en las ventas de arroz, práctica conocida como bandeo, al aducir que viola el decreto de fijación de precios de ese cereal.
La medida se estableció mediante un cambio al reglamento de fijación de precios del arroz que entró en vigencia el 4 de abril pasado. Se modificó el artículo 10 de ese reglamento y se estableció que se consideran contrarias a la regulación de precios las prácticas comerciales tales como ofertas y promociones.
La modificación define que se pueden hacer denuncias tanto en instancias administrativas como judiciales ante la posible presencia de prácticas monopolísticas relativas, conforme la Ley de Promoción de la Competencia y de Defensa Efectiva del Consumidor.
La norma se aplica solo al arroz, pues es el único producto que en Costa Rica mantiene precio fijado por ley. En todos los demás, una posible práctica de bandeo no violaría la norma.
El sector comercial reaccionó fuertemente contra la medida del Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC), porque aduce que viola la libertad de comercio.
Aparte de la critica concreta en defensa del bandeo, la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR) alegó que el problema de fondo es mantener la fijación de precios al arroz, una práctica que ha sido criticada en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y ahora en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), durante el proceso de adhesión de Costa Rica.
Intempestivo
Sobre la prohibición al bandeo, Yolanda Fernández, presidenta de la CCCR, dijo que los comerciantes realizaban esa práctica mediante acuerdos con los proveedores y ahora no saben cómo manejar esos pactos.
El bandeo no solo se realiza con arroz sino con otros productos, como leche con el adicional de cereal, desinfectantes con controladores de mosquitos y otros, detalló por su parte Alonso Elizondo, director ejecutivo de la CCCR. Al tener precios liberalizados, la medida del MEIC no rige contra los otros bienes a los cuales se les aplican las promociones de bandeo.
La asociación Consumidores de Costa Rica (Concori) aseguró que en este tema el MEIC tiene una posición "vacilante", pues en un decreto del 22 de julio del 2016 había permitido vender arroz junto con otro productos en promociones.
Concori aseguró que el bandeo beneficia especialmente a los consumidores más pobres de nuestro país, que ven en una botella de aceite o una lata de atún adherida con cinta a una bolsa de arroz un ahorro importante para su economía familiar.
El viceministro del MEIC, Carlos Mora, dijo que desde cualquier punto que se analice el bandeo causa una distorsión de mercado. Ya sea porque el arroz se vende más barato o porque se regalan los productos adicionales.
Agregó que el MEIC debe velar por el bienestar de toda la cadena y no solo del consumidor y que en este caso se estaba afectando al industrial y al productor, lo cual obligó a eliminar la distorsión.
Negó que en el decreto original el MEIC haya autorizado este método comercial, pues alega que el Gobierno tiene claro que la fijación de los valores del arroz es una estrategia transitoria hacia la liberalización de precios.
Mora evitó dar fechas para cumplir esa medids, pues dijo que depende del aumento en la productividad y de otros factores, que se están trabajando con los arroceros.
Además se preguntó quién paga esa distorsión de regalar o vender más barato un producto y denunció que el MEIC detecta ese comportamiento comercial cada vez con más frecuencia.
Fernández y Elizondo afirmaron, por separado, que el Gobierno tomó esta medida por las presiones el sector arrocero costarricense.
El presidente de la Corporación Arrocera Nacional (Conarroz), Eliécer Araya, dijo que en Costa Rica hay costumbre de incumplir la ley, lo cual se presentaba con la práctica del bandeo, pues el decreto original ya establecía prohibiciones. Agregó que tal fue la situación que obligó a emitir la modificación con la advertencia directa.
"El objetivo es que se respete el decreto con la fijación de los precios; sino para qué lo publican", señaló el dirigente arrocero.
Análisis legal
Elizondo adelantó que estarán analizando los alcances legales de la medida del MEIC, para definir una probable inconstitucionalidad o una limitación de la libertad de comercio. A partir de eso, explicó, se decidiría si se presenta un proceso contencioso administrativo o alguna otra denuncia, como una acción de inconstitucionalidad ante la Sala IV.
Por su parte, Fernández dijo que hay contradicciones por parte del MEIC, pues se argumenta que la prohibición se basa en la ley de promoción de la competencia y en esa misma normativa se establece que las fijaciones de precios son temporales y no permanentes. "Para el caso del arroz, la fijación temporal del precio lleva ya casi tres años en este Gobierno, lo cual es contrario a lo que dice esa ley", advirtió la dirigente.
Según Fernández, el MEIC ha tenido un juego con este tema del bandeo o promociones con el arroz, pues en algunas ocasiones permitió la práctica en el mercado y en otras no lo hizo, hasta que ahora puso en vigencia la modificación al decreto.
La dirigente denunció que el MEIC no tiene capacidad de supervisión para controlar prácticas comerciales en todo el país, pues solo se dedica a controlar cadenas de supermercados y no lo hace en comercios individuales y particularmente en la zona rural. "Ya sabemos quiénes serán los que tendrán que cumplir", enfatizó.
La CCCR denunció también que el MEIC se contradice al prohibir una práctica que al fin de cuentas solo beneficia al consumidor, pues recibe una regalía adicional a la compra del producto.
