La construcción pública presenta una fuerte caída luego de la conclusión del Proyecto Hidroeléctrico Reventazón, mientras que la actividad privada repunta con la edificación de residencias, especialmente.
Así lo reflejan los resultados del índice mensual de la actividad económica (IMAE) de la construcción y lo explica el Banco Central en su Informe mensual de coyuntura económica, de abril pasado.
Según el IMAE, la construcción pública disminuyó en febrero un 10,6% respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que la privada salió de los números negativos y aumentó un 4,2%.
La obra de particulares presenta dos fuertes aumentos, en noviembre del 2014 y junio del 2015, que obedecen, según el Banco Central, a una mayor cantidad de metros efectivamente construidos tanto en viviendas como en proyectos no residenciales.
Javier Chacón, director de Operaciones del Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos, explicó que durante el 2015 no se registró ningún megaproyecto, lo cual significa que se levantaron una gran cantidad de obras con áreas medianas. Las más significativas fueron una torre de apartamentos en Sabana Sur, de casi 100.000 metros cuadrados (m²) en noviembre del 2014 y en un condominio en Guanacaste de casi 30.000 m² en junio del 2015.
Chacón detalló que la estabilidad en el tipo de cambio y en la tasa básica pasiva, entre otros factores, contribuyen al aumento de las obras privadas.
El incremento en la obra privada todavía no compensa la caída en la estatal, así que la general baja un 4,13% en febrero del 2016, respecto a igual periodo anterior.
Pese a la reducción global, el número de trabajadores con seguro de pensiones de ese sector, registrados en la Caja Costarricense de Seguro Social pasó de 80.932, en marzo del 2015, a 81.138 en marzo del 2016.
Jorge Arturo González, presidente de la Cámara Costarricense de la Construcción, detalló que por cada empleo directo en proyectos de construcción se generan tres empleos indirectos, siempre dentro del sector y de cinco a seis en otras cadenas.
Perspectivas. Para González, hablar de crecimiento sostenido en la construcción privada todavía es muy incierto y dependerá de las condiciones de la economía.
Una señal de mayor aumento en los próximos meses es que durante el primer trimestre del 2016 el Colegio contabilizó 2.590 millones de m² en el registro de responsabilidad profesional de planos constructivos, un 14,71% mayor al reportado en el mismo periodo del año anterior. Los aumentos más importantes se encuentran en Heredia y Limón.
Según Chacón, se ha determinado que las obras de viviendas empiezan, aproximadamente, dos a tres meses posteriores a este registro, mientras que las de mayor complejidad requieren de plazos entre cuatro o seis meses para comenzar.