La Contraloría General de la República (CGR) devolvió sin refrendar, por cuarta vez, el contrato para levantar el Centro Nacional de Congresos y Convenciones (CNCC) y le pidió datos adicionales al Instituto Costarricense de Turismo (ICT).
En esta última ocasión, el pasado 19 de octubre, la entidad pide justificar claramente porqué se usarán $7,72 millones procedentes del impuesto de $15 que debe pagar cada turista para llegar al país, esto con el fin de financiar parte de la construcción del proyecto.
La ley creó ese tributo con el destino específico de financiar la promoción de Costa Rica.
En el oficio DCA-2615 de ese día, la Contraloría también insiste en conocer la explicación del ICT a la Autoridad Presupuestaria, la cual preguntó porqué no se usa el superávit de $45 millones que tiene el Instituto para financiar la obra.
El valor final del CNCC, incluyendo planos, permisos y otros, sería de $38,6 millones, según estiman los funcionarios del ICT.
La CNR también solicita aclarar varios puntos referentes a las cláusulas ante una posible suspensión del contrato con la firma que sea adjudicada.
El CNCC tendrá un edificio de 15.600 metros cuadrados, en un terreno de 10 hectáreas cedido por el Programa Integral de Mercadeo Agropecuario (PIMA).
Que se haga. Gustavo Araya, presidente de la Cámara Costarricense de Hoteles (CCH) y vicepresidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), manifestó que es urgente el inicio de las labores de construcción del CNCC.
Incluso, a nombre de las dos cámaras, ofreció ayuda al ICT para mostrarle a la CGR que el Centro servirá para promocionar a Costa Rica. Por eso, se justifica usar ingresos del impuesto de $15 para financiar parte de la obra.
Araya señaló que el apoyo al ICT en este proceso se puede dar demostrando cómo los centros de convenciones alrededor del mudo son imán y atractivo de turismo, que es lo que a la Contraloría le preocupa.
En tanto, el ministro de Turismo, Mauricio Ventura, calificó nuevamente como normal que un ente contralor solicite ampliaciones de información acerca de contratos.
Juan Carlos Borbón, gerente del proyecto del CNCC, explicó que hay un informe de la Procuraduría General de la República, solicitado hace dos años con otros fines, donde se corrobora que esa obra es parte de la promoción turística de Costa Rica.
Agregó que el ICT ya mandó a la Contraloría una justificación sobre la facultad, desde el punto de vista legal, que tiene para la construcción. Ahora queda explicar, agregó, el porqué es una herramienta de atracción de ese nuevo mercado de turistas.
Ventura, en tanto, consideró que en el tema de meditar si es necesario un crédito de $12 millones para financiar parte de la obra, hay total concordancia con la Contraloría. Eso porque, adujo, el ICT no ha tramitado el crédito para analizar si es conveniente.
Sin embargo, el jerarca había estimado originalmente que el inicio de las obras se daría a finales de julio pasado. Luego trasladó esa fecha a finales de agosto y después a finales de setiembre.
Ahora, reconoció que el inicio de la construcción se dará cuando la Contraloría emita el refrendo final del contrato.