El Gobierno anunció ayer la licitación para construir el Centro Nacional de Congresos y Convenciones (CNCC), con una inversión de $35 millones y se comprometió a abrirlo en diciembre del 2017.
La responsabilidad para avanzar rápido en esta obra, cuya idea se lanzó desde hace 15 años, fue asumida por el presidente de la República, Luis Guillermo Solís. El mandatario participó en el acto en el que se anunciaron la licitación y un plan de promoción de Costa Rica en turismo de reuniones.
La edificación tendrá 15.600 metros cuadrados (m²) de construcción y estará en un terreno de 10 hectáreas, cedido por el Programa Integral de Mercadeo Agropecuario (PIMA).
Se ubicará junto a la autopista General Cañas, detrás de las instalaciones del Centro Nacional de Abastecimiento y Distribución de Alimentos (Cenada).
El ministro de Turismo, Mauricio Ventura, dijo que las instalaciones serán solo la cabeza visible de una estrategia de Costa Rica de atraer congresos y convenciones.
Agregó que ese segmento se compone por unos 120.000 congresos anuales, con 120 millones de delegados y un movimiento económico de $11.000 millones anuales en todo el mundo.
Atrasos. La ejecución de la idea avanza muy lento, pese a tener 15 años de estar en el papel y pese al apoyo de varias administraciones. En abril del 2013, durante el gobierno de Laura Chinchilla, se anunció la apertura de la licitación para construir el centro y se aseguró que estaría abierto en noviembre del 2014, aunque la tramitomanía atrasó la obra.
En aquel momento, el valor se calculó en $30 millones.
Uno de los últimos problemas fue lograr permisos para construir un puente para vehículos a la salida del CNCC, de tal manera que se evite una vuelta grande para regresar a San José.
Ventura dijo que el compromiso del mandatario Solís se basa en cálculos según las cuales el CNCC estaría abierto a finales del 2017.
Agregó que hechos concretos del avance son la firma de contratos con la Empresa de Servicios Públicos de Heredia, la cual suministrará electricidad, agua potable, agua para ornamentos y se encargará de las aguas residuales. Además, dijo, ya está en la plataforma Mer-Link la licitación para construir la obra.
El financiamiento procederá de fondos propios del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), que aporta $23 millones. Los otros $12 millones provendrán de un préstamo sindicado entre el Banco Nacional y el Banco de Costa Rica, dijo ayer el ICT.
Gran expectativa. Gustavo Araya, presidente de la Cámara Costarricense de Hoteles (CCH), resaltó que se espera un incremento de entre cinco a 10 puntos porcentuales en la ocupación hotelera.
Ese dato es aún más importante si se toma en cuenta que el turismo de reuniones tiene su mayor pico entre mayo y junio y entre setiembre y octubre, los meses de más baja visitación en Costa Rica, agregó Araya.
Adelantó que estará permanentemente “de necio” con el Gobierno, para lograr que la obra esté lo mas pronto posible.
Para Pablo Heriberto Abarca, presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), este Gobierno ha hecho el movimiento más contundente en los últimos 15 años que se viene anunciando esta construcción.
Consideró que este centro tendrá mucho impacto económico.