Quienes visitaron el país en los primeros tres meses del año dejaron $1.242 millones, el mayor monto registrado por el Banco Central en una serie de uniformes desde el 2000.
Este monto es parecido al que Costa Rica recibió, en todo el año, en los periodos 2000 y 2001.
Una de las características de estos recursos es que quedan bastante repartidos en el país porque los viajeros, generalmente, visitan varios lugares, explicó el ministro de Turismo, Mauricio Ventura,
Este dinero está registrado en la cuenta “exportaciones por viajes” que el Banco Central contempla en la balanza trimestral de pagos.
Los periplos pueden ser personales o de negocios.
En los primeros se incluyen vacaciones, que es el grueso de este rubro, pero también participación en actividades recreativas y culturales, visita a familiares y amigos, peregrinación o razones de estudios y de salud.
Los viajes de negocios, por su parte, abarcan las tripulaciones de medios de transporte, que hagan escala o estén de paso; los funcionarios gubernamentales en viaje oficial, y los funcionarios de organismos internacionales en misión oficial.
También las personas que viajan en representación de sus empresas (excepto el personal diplomático), trabajadores por cuenta propia no residentes que vienen por motivos de negocios, y trabajadores fronterizos, de temporada y otros colaboradores temporales que no son residentes de la economía que los emplea.
Según un desglose que brindó el Banco Central, del ingreso total de divisas por viajes en el 2015, un 77% fueron por personales y un 13% por negocios.
Más vuelos dejan frutos. El ministro Ventura y el presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), Pablo Heriberto Abarca, señalaron como principal causa el incremento en el número de vuelos al país.
“Claramente, hay crecimiento. Ese aumento coincide con el incremento de visitación, o de ingresos por turistas en las vías aéreas, lo cual significa que la estrategia, que tiene permanentemente el sector público y privado en la atracción de líneas aéreas, ha sido exitosa y está dando sus frutos”, explicó Abarca.
“Si uno tuviera que señalar la más importante de las razones, que no es la única porque hay un conjunto de cosas siempre alrededor de esto, posiblemente la más importante sea la llegada de nuevas líneas aéreas”, añadió Ventura.
El funcionario aseguró que redoblaron esfuerzos para aumentar la conectividad de Costa Rica con el mundo.
Según información suministrada por el Instituto Costarricense de Turismo (ICT), en el 2015, cinco nuevas aerolíneas iniciaron vuelos a Costa Rica: Southwest Airlines, Volaris, Alaska Airlines, Tui Thomson y British Airways.
Además, seis establecieron nueve rutas nuevas (JetBlue, Spirit Airlines, Avianca, XTRAirways- Apple Vacations, WestJet y United Airlines) y seis más aumentaron sus frecuencias de vuelo (United Airlines, Condor, Interjet, JetBlue, Sun Country Airlines y United Airlines).
Este año, tres nuevas empresas anunciaron vuelos directos al país: British Airways inició en abril un vuelo directo entre Londres y San José; Air France lo hará a partir de noviembre próximo entre París y San José, y Edelweiss –la aerolínea vacacional líder en Suiza– ofrecerá en el 2017, vuelos entre Zúrich y San José.
Asimismo, cuatro compañías anunciaron cuatro nuevas rutas (XTRAirways-Apple Vacations, Southwest Airlines, Air Canada y Condor) y otras tres aumentaron sus frecuencias de viaje (JetBlue, Volaris y Air Canadá).
En turismo médico, Jorge Cortés, presidente de Promed (promotora del turismo médico hacia nuestro país), explicó que el mayor crecimiento es en la parte odontológica.
“En general la demanda por turismo médico ha permanecido estable en lo que a la parte médica se refiere, no así en la parte de cosmética dental, que sí ha tenido un incremento importante, básicamente debido a que son procedimientos reconstructivos que no son cubiertos por lo general por los seguros médicos”, detalló.
¿Dólar no ha afectado? Este crecimiento se ha dado pese a que el país es caro, como reconocen Ventura y Canatur, y que los empresarios han reclamado que el precio estable del dólar hace que Costa Rica sea todavía más oneroso frente a otros destinos.
Según Abarca, el país ha sido exitoso en su estrategia y en enfocarse en un segmento que puede pagar altos costos. No obstante, cree que el Estado debería trabajar más en cómo bajarlos.
“El tema del tipo de cambio, nosotros lo hemos enfocado desde el punto de vista de oportunidad de generar mucho más empleo y de que el Banco Central no meta la mano para incidir en una estabilidad cuando los factores externos no están dando esa estabilidad”, comentó Abarca.
Se requiere más inversión. Para Roberto Artavia, especialista en temas de competitividad y actual presidente de Viva Trust (modelo de negocios y filantropía), el país tiene capacidad para seguir creciendo en ciertos tipos de turismo, pero requiere invertir.
“Aunque hay algunos cuellos de botella en el sistema, por ejemplo la capacidad del aeropuerto (Juan Santamaría), ingresos en parques nacionales o en salas para grandes eventos, entre otros, aun es posible crecer en volumen de ciertos tipos de turismo, y sobre todo con valor agregado especializado (médico, salud y bienestar, capacitación, etc.), con una programación cuidadosa”, dijo.
Añadió que el sistema debe crecer en varias partes y ya se ven inversiones en camino como el Centro de Convenciones, nuevos polos gastronómicos, como el de barrio Escalante, y la expansión del transporte y alojamiento, que representan Uber y Airbnb.