'Hay que prepararse para un efecto en inversión en Costa Rica', advierte exministro de Comercio tras gane de Trump

San José.

El exministro de Comercio Exterior (Comex), Alberto Trejos, advirtió de que el impacto más fuerte para Costa Rica de la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump podría darse en el área de las inversiones, aunque también es de esperar algún efecto en temas comerciales y migratorios.

Trejos dijo que deberá tomar decisiones en los temas económicos en los cuales hizo propuestas, aunque resta ver cuánto de lo dicho fue mero discurso político y cuánto será realidad.

La obligación de tomar decisiones tendrá que ver con la presión de quienes votaron por él creyendo esas propuestas, con quiénes se rodeará en el Gobierno y de su agenda con las dos cámaras legislativas.

Pero la inversión un campo en el cual fue más claro en su discurso de campaña y para lo cual Costa Rica debe prepararse para un efecto, enfatizó el exministro del Comex.

De acuerdo con Trejos, en este campo de las inversiones, Trump no tendría límites ni en acuerdos comerciales ni a lo interno de su país para poner en práctica un cambio en las reglas fiscales. Él buscará que las compañías estadounidenses que tienen presencia en el exterior se lleven las operaciones de vuelta a su país.

Trejos estaba al frente del Comex cuando Costa Rica negoció el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana.

A continuación, la entrevista con el exministro.

– ¿Cuáles cambios son probables y posibles en materia comercial?

– Es uno de los pocos temas en los que él sí dijo que quería hacer cosas. Como todo lo que dice, habría que traducirlo en la práctica. Puede significar varias cosas. No vería como imposible que él quisiera hacer algo para el Nafta (siglas en inglés para el Tratado de Libre Comercio de América del Norte), lo cual sería trágico. Posiblemente también algo incluso para el Cafta (siglas en inglés para el Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y Estados Unidos), aunque no ha dicho casi nada explícitamente.

"No sé hasta dónde querría parar el proceso multilateral en la OMC (Organización Mundial del Comercio). Me parece que los esfuerzos por acercarse a Asia quedan muertos y me parece que va a hacer un intento por cambiar (las reglas comerciales) en las áreas que los acuerdos no limitan, lo cual sería mover las barreas del comercio muy para arriba, posiblemente las no arancelarias".

– ¿Cómo se impactaría la inversión?

El tema comercial va complementado de esta segunda cosa. Trump habló con más claridad de este tema –y no tendría límites en los acuerdos– de un cambio en las reglas fiscales orientado a que las compañías estadounidenses que operan simultáneamente en muchos países se lleven las operaciones de vuelta a su país. Esto aun si eso significara que las empresas queden debilitadas de cara a su competencia internacional, algo que él no lo reconoció como cierto.

"Pareciera tener en mente esto para el tipo de manufactura pesada, donde se dividieron en componente, en segmentos, las compañías como la automotriz, donde se hacen partes en algunos países y se conservaron otras en Estados Unidos.

"No es improbable, entonces, algún tipo de viraje, sobre todo en temas fiscales, que genere un incentivo para que ese tipo de inversión disminuya (en otros países). La parte de su discurso que claramente hace preparase para una afectación (en Costa Rica) es la parte de la inversión".

– ¿Qué considera del tema de migración y de su eventual impacto en áreas comerciales?

Si hace algo muy fuerte contra inmigración, algo va a impactar en Costa Rica pese a que no tiene relación directa pero sí cercana a países con inmigrantes.

"El lenguaje usado sugeriría que las cosas en México se complican. Pero aquí también cabe preguntarse cuánto va a hacer y cuánto no. Si hace poco, no complicaría tantas cosas. Pero México está con problemas de inseguridad y si se le empuja a hacer cosas ilegales se vuelve mejor socio para el narcotráfico.

"Me preocupa en un entorno de ese tipo, mexicanos, salvadoreños, hondureños y guatemaltecos, teniendo la dificultad para emigrar, el único palo que tendrían para agarrarse seríamos nosotros. Actualmente no tenemos presión migratoria, no de esos países, pero sé para dónde agarraría la presión que se acumularía en esas naciones si hay medidas migratorias duras en Estados Unidos".

– Esas naciones de Centroamérica dependen mucho de las remesas que mandan familiares en Estados Unidos. ¿Se podrían afectar las exportaciones de Costa Rica a esos destinos?

– Definitivamente se pueden bajar. Comercialmente, el triángulo del norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) está formado por países que son importantes (para Costa Rica). Son naciones dependientes de las remesas, las cuales son una válvula de salida para la presión que acumulan esos mercados; a nosotros se nos complica.

– ¿Qué tanto se parece el discurso de campaña de Trump a la realidad?

– Por la naturaleza de la campaña y de la persona que lo dijo, no es tan fácil determinarlo, ni cuánto de esto pone de primera prioridad y con quién y cómo lo hará. La persona que vimos en campaña no tiene capacidad de crear consenso con el Congreso, ni siquiera entre los republicanos. La gran pregunta es si ese era el de campaña o si era el de verdad.

"El tono del discurso de aceptación fue el menos alarmante posible. En algunas cosas cambió de tono y otras no las volvió a decir. Eso me recuerda hasta dónde las tonteras que se dicen antes de un partido (de fútbol) son parte de la manera de ser o de la estrategia del partido. Este señor escogió un estilo muy agresivo porque estaba buscando un voto al que podía encantar con eso. Pero si manejara sus negocios como sugirió que manejaría el país, ya no existirían. Además, hay que preguntarse cuánto pueda hacer y cuánto fue lema de campaña, cuánto puede hacer y cuánto debe hacer porque la gente se le viene encima si no lo hace.

– ¿Es más fácil en temas comerciales?

– Desgraciadamente, la otra parte de su discurso que lo obliga a hacer algo en la práctica es en la comercial. Lo tiene que hacer en cualquier momento. Decir "yo me salgo" (de una acuerdo) es una medida muy dura. Se refirió abiertamente al Nafta y a OMC, pero salirse de ahí es un paso muy duro. Se refirió bastante menos al Cafta, pero si lo hace con el Nafta, hay que preocuparse de cuáles serían las consecuencias de tomar un mismo camino con el acuerdo con Centroamérica.

– ¿Ve algún otro impacto económico?

– El último tema económico, del cuál también hay que esperar cuánto es discurso y cuánto es en serio, es el de la deuda. Al fin de cuentas, la deuda pública de Estados Unidos es uno de los activos del mercado financiero internacional. Al momento en que se genera una duda sobre la capacidad de colocar deuda, se afectan las tasa de interés. Es un área en lo que pensaría que haya sido más discurso que otra cosa.