No tener seguro de salud y la escasa educación formal son los dos indicadores que más golpean a los hogares pobres costarricenses.
Así se desprende de los resultados del Índice de Pobreza Multidimensional que publicó, este jueves, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Esta es una herramienta que detalla las necesidades que tienen las familias pobres en diferentes áreas, para definir acciones específicas con el fin de reducir la pobreza.
Es una forma complementaria de medir la pobreza al cálculo por insuficiencia de ingreso, según el cual el 21,7% de los hogares nacionales son pobres.
El nuevo indicador considera pobres los hogares que sufren de cuatro o más privaciones. No tener seguro de salud, por ejemplo, es una carencia.
En el país, 21,8% de los hogares sufre este tipo de pobreza. Limón posee el valor más alto.
La herramienta considera cinco dimensiones: educación, vivienda, salud, trabajo y protección social.
Por dimensión, las principales que explican la pobreza son vivienda y uso de Internet, así como educación.
Por indicador, no tener seguro de salud es el de mayor incidencia en la pobreza; se consideran con esta carencia los hogares con al menos una persona que no cuenta con el beneficio.
Le sigue en importancia el bajo desarrollo de capital humano. Se consideran con esta privación aquellos hogares en los cuales ninguna persona, en edades entre 25 y 35 años, tiene título de bachillerato de secundaria o ninguno de los que tiene entre 36 y 57 años posee noveno año, o de los que tienen entre 58 y 64 años, ninguno posee primaria completa.
Otras carencias son incumplimiento de derechos laborales y el empleo informal.
Versión de los responsables. No fue posible conversar este jueves con Gustavo Picado, gerente financiero de la Caja Costarricense de Seguro Social. Pero este funcionario había explicado los planes que tiene la entidad para extender el seguro de salud.
Uno de ellos es el esquema multipatronos, para que entre varios patronos paguen seguro a las empleadas domésticas.
En educación, se le consultó a la ministra de esa cartera, Sonia Marta Mora, ¿como un país que dedica un monto equivalente a casi el 8% de su producción a la educación tiene a este sector como uno de las principales causas de la pobreza?
Mora contestó que este es el resultado de la crisis de los años ochenta, en la cual el Estado dejó de invertir en educación, lo que generó un rezago que no se ha podido superar. La funcionaria se refirió a algunas de las acciones que se realizan para atacar tal debilidad.
En materia de vivienda, Costa Rica cuenta con al menos tres instituciones públicas que se dedican al tema; no obstante, este es uno de los principales problemas que afrontan los hogares pobres.
El ministro de Vivienda, Rosendo Pujol, explicó que de los 28 puntos que se le asignan a la vivienda y disponibilidad de Internet, nueve puntos corresponden a tener Internet; no obstante, dijo que se llevan la tarea.
Sobre el uso de Internet, el ministro de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt), Marcelo Jenkins, indicó que la Ley General de Telecomunicaciones previó un sistema para extender estos servicios a toda la población; por medio de Fonatel (Fondo Nacional de Telecomunicaciones) y en el programa CR Digital se incluyeron cinco iniciativas para llevar las telecomunicaciones (en cuenta Internet) hasta las poblaciones vulnerables.
El jerarca de Bienestar Social, Carlos Alvarado, dijo que se requiere una labor integral de todas las entidades para que el país mejore en estos indicadores. Agregó que no tienen una meta para reducir la pobreza multidimensional.