Costa Rica intenta de nuevo que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) le abra la puerta a un proceso de adhesión, tras no lograrlo en la primera gestión, el 30 de mayo del 2013.
El nuevo intento será en junio próximo (día no fijado), cuando se reúna el Consejo de Ministros de esa organización, integrada por 34 países de alto desarrollo, en París, sede de la Secretaría. Ahí se definirá si Costa Rica está listo para iniciar el trámite de adhesión.
La OCDE, por medio de su oficina para Latinoamérica, con sede en México, contestó en un correo electrónico que no se referirá al tema de Costa Rica.
En tanto, el Gobierno costarricense está optimista. Alexánder Mora, ministro de Comercio Exterior (Comex), coordinador del proceso, explicó que el 27 de febrero pasado se cumplió el plan de acción acordado con esa entidad.
Ese plan involucra a 27 entidades públicas.
Además, el Gobierno visita a algunos países miembros de la OCDE en busca de respaldo.
Mora viajó la semana pasada a Australia, donde se reunió con los Gobiernos de ese país y de Nueva Zelanda. Adelantó que a finales de marzo irá a a Japón y Corea a un foro del Banco Interamericano de Desarrollo y aprovechará para gestionar apoyo.
Además, será parte de la comitiva que acompañará al presidente de la República, Luis Guillermo Solís, a España, Italia y Francia, a mediados de este mes.
Solís se reunirá con presidentes o primeros ministros de esas naciones y el 16 de marzo estará en la OCDE, en la reunión del Consejo de Representantes.
Muy positivo. Juan Rafael Lizano, presidente de la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria, y Luis Obando, asesor en comercio exterior de la Cámara de Industrias de Costa Rica, consideraron que el proceso para acceder a ese foro de países ricos, traerá beneficios, pues se exige excelencia en política pública.
Empero, coincidieron también en que no tienen elementos para analizar el costo-beneficio.
El exviceministro del Comex, Fernando Ocampo, dijo que una membrecía contribuiría a fortalecer la confianza en el país, en sus instituciones, ayudaría a consolidar la seguridad jurídica, a promover también una mejora en la competitividad y la productividad, ayudaría a modernizar el Estado y a atraer inversiones.
Rónald Jiménez, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado, señaló la buena experiencia de países latinoamericanos (Chile y México son miembros y Colombia está en proceso de adhesión) en el foro.