El directorio ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) se pronunciará “muy pronto” sobre la continuidad de su directora ejecutiva, Kristalina Georgieva, al frente del organismo, luego de que fuera acusada de manipular datos en un informe en favor de China cuando era directora general del Banco Mundial.
Luego de una reunión, este viernes 8 de octubre, el directorio del FMI dio cuenta de “progresos significativos” en la comprensión de este asunto, pero “acordó pedir nuevos detalles con el objetivo de llegar a una conclusión” muy pronto, informó en un comunicado.
El directorio ejecutivo del FMI podría reunirse de nuevo este sábado, indicó a la AFP una fuente cercana al caso bajo condición de anonimato, y agregó que Georgieva recibió el apoyo de Francia y de los países europeos en general.
Pero Estados Unidos, un miembro central del FMI, no ha manifestado su posición y parece reticente a dar su acuerdo, según dos fuentes en conocimiento del caso.
El tiempo apremia a pocos días de las reuniones de otoño del FMI y el Banco Mundial, que comienzan este lunes 11 de octubre.
"Una investigación está en curso con el directorio del FMI, y el Tesoro pidió un informe completo y justo de todos los hechos", explicó a la AFP Alexandra LaManna, portavoz del Departamento del Tesoro.
Una investigación de la firma de abogados WilmerHale difundida el mes pasado señaló que, como directora general del Banco Mundial, Georgieva estuvo entre los altos ejecutivos que presionaron a sus equipos para cambiar datos a favor de China en 2018 en su muy vigilado informe Doing Business.
El Banco Mundial descartó el informe, que evalúa a las naciones con base en su clima de inversión, mientras Georgieva, quien llegó a la cabeza del FMI en 2019, calificó los hallazgos de la investigación como "errados" y dijo que "no presionó a nadie para alterar algún informe".
El directorio del Fondo se reunió con representantes del bufete y con Georgieva esta semana.
“Nuestra responsabilidad primera es preservar la integridad de las instituciones financieras internacionales”, añadió el bufete.
Georgieva, de 68 años, cuenta con el apoyo de Francia y otros países europeos, aseguró la fuente anónima.
Sin embargo, Estados Unidos, miembro clave del FMI, aún no se ha pronunciado, según dos fuentes con conocimiento de la situación.
La director ejecutiva del FMI en repetidas ocasiones la alta funcionaria ha negado las conclusiones del informe. Ella envió su testimonio de 12 páginas a los 24 miembros de la junta, así como una carta de su abogado.
“Me complace haber tenido finalmente la oportunidad de explicarle al Directorio del FMI mi papel en el informe Doing Business y cómo respeté la integridad del informe”, dijo. “Espero una rápida resolución del asunto”, agregó.
El bufete de abogados WilmerHale descubrió que Georgieva, junto con su socio Simeon Djankov, un exministro de Finanzas búlgaro que creó el informe, y Jim Yong Kim, entonces presidente del banco, presionaron al personal para cambiar el cálculo de la clasificación de China para evitar conflictos con Pekín.
La iniciativa se produjo mientras el liderazgo del banco estaba involucrado en negociaciones delicadas con China sobre el aumento del capital crediticio en la organización.
Según la investigación, Pekín se quejó por su puesto 78 en la lista en 2017, y el informe del año siguiente habría mostrado que caía aún más.
En las semanas previas a que se publicara el informe, a fines de octubre de 2017, Kim y Georgieva pidieron al personal que estudiara la posibilidad de actualizar la metodología con respecto a China, según la investigación de WilmerHale.
Tras las acusaciones, el Banco Mundial descartó el informe, que evalúa a las naciones con base en su clima de inversión, mientras Georgieva calificó los hallazgos de la investigación como “errados” y dijo que “no presionó a nadie para alterar ningún informe”.
Georgieva comenzó su liderazgo en el FMI el 1. ° de octubre de 2019, reemplazando a Christine Lagarde, designada como presidenta del Banco Central Europeo.