Túnez. Más de 200 personas fueron detenidas y decenas resultaron heridas en una nueva noche de disturbios en varias ciudades de Túnez, alimentados por un creciente descontento social ante las recientes medidas de austeridad del gobierno.
Las manifestaciones pacíficas y esporádicas habían empezado la semana pasada contra el alza de los precios y un presupuesto de austeridad que incluye subidas de impuestos y entró en vigor el 1.° de enero.
La protesta degeneró en disturbios el lunes por la noche, especialmente en Túnez y Teburba, al oeste de la capital, donde estalló la violencia tras la muerte de un hombre durante una manifestación.
En la segunda noche de enfrentamientos, el martes, 49 policías resultaron heridos y 206 personas fueron detenidas, informó el miércoles el portavoz del Ministerio del Interior, Jlifa Shibani, quien acusó a los alborotadores de estar pagados por líderes políticos.
Over 200 people arrested & dozens hurt during clashes between protesters & police in several parts of Tunisia in fresh anti-austerity protests.#Tunisia #Tunisie #tunisian #arabs #protest #Unrest #Arabs #muslimstoday #islam #peace #Palestine pic.twitter.com/0feELLwSkB
— muslims today (@muslims_today) January 10, 2018
“Hay actos de saqueo y de robo, pero también un mensaje político de una parte de la población que no tiene nada que perder y que se siente ignorada”, siete años después de una Primavera Árabe que reclamaba trabajo y dignidad, consideró el politólogo Selim Jarrat.
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Este subrayó que fueron atacados muchos edificios públicos, símbolos del Estado. Y que el gobierno “por el momento se ha posicionado con bastante firmeza contra los manifestantes”.
Un supermercado de la periferia sur de Túnez fue saqueado el martes por la noche por jóvenes que robaron dinero y mercancías, según Mohamed Baccuche, director adjunto de Carrefour.
En #Tunisie 🇹🇳 a connu une 2ème nuit de contestation sociale. Les affrontements entre manifestants et policiers ont fait des dizaines de blessés. ⏯ https://t.co/gc0Ew609iI pic.twitter.com/Qm7cPmzD4k
— TV5MONDE Info (@TV5MONDEINFO) January 10, 2018
En Sidi Buzid, ciudad desfavorecida del centro del país donde en diciembre del 2010 comenzó la protesta social que marcó el inicio de la Primavera Árabe, grupos de jóvenes cortaron carreteras y lanzaron piedras a la Policía, que respondió con gases lacrimógenos durante buena parte de la noche, señaló un periodista de la AFP.
También hubo incidentes en Gafsa (sur), Kasserin (centro), Jedaida (norte) y otros barrios populares de Túnez.
Pero la calma había regresado el miércoles por la mañana al conjunto del país.
En Teburba, a 30 kilómetros al oeste de la capital, estallaron los disturbios después de que cientos de jóvenes tomaran las calles tras el entierro de un hombre fallecido en los disturbios de la noche anterior.
Persiste la controversia sobre las causas de la muerte del hombre, de 45 años, considerado como un mártir por los manifestantes, aunque los resultados de la autopsia realizada el martes no se han hecho públicos.
El Ministerio del Interior negó que muriera a manos de la policía y destacó que el hombre no tenía ninguna señal de violencia en el cuerpo. El portavoz, Shibani, precisó que el individuo padecía “problemas respiratorios”.
Situación efervescente
Estos incidentes se producen en un contexto de reivindicaciones sociales en Túnez contra las medidas de austeridad previstas por el gobierno, en especial el alza del impuesto al valor agregado (IVA), que entró en vigor el 1.° de enero.
Tras varios años de marasmo económico y contrataciones masivas de funcionarios, Túnez se enfrenta a importantes dificultades financieras.
La inflación superó el 6% a finales del 2017 mientras la deuda pública y el déficit comercial alcanzan niveles preocupantes.
Los activistas de la campaña “Fech Nestannew” (“Qué estamos esperando”), lanzada a principios de año contra el alza de precios, llamaron a manifestarse masivamente el viernes.El mes de enero está tradicionalmente marcado por las protestas en Túnez desde la revolución de 2011. El contexto es especialmente tenso este año antes de la celebración en mayo de las primera elecciones municipales desde la Primavera árabe.