Una investigación de la Universidad de Northumbria confirmó que el glaciar gigante Pine Island, ubicado en la Antártida Occidental, tiene el potencial de retroceder de forma rápida e irreversible, lo cual elevaría el nivel del mar.
El estudio confirma que el glaciar tiene, al menos, tres puntos de inflexión distintos.
El tercer y último evento, provocado por el aumento de la temperatura del océano en 1,2 grados, conduce a un retroceso irreversible de todo el glaciar.
Un retroceso de este tipo, una vez iniciado, podría provocar el colapso de toda la capa de hielo de la Antártida Occidental, que contiene suficiente hielo para elevar el nivel global del mar en más de tres metros.
Si llegara a producirse, los expertos han determinado que el retroceso sería imposible de detener.
En el pasado, ya se planteó el potencial de esta región para cruzar un punto de inflexión, pero los investigadores de este estudio han afirmado que este es el primero en confirmar que, efectivamente, el glaciar Pine Island cruza esos umbrales críticos.
Dicho glaciar es una región de hielo de flujo rápido que tiene casi el tamaño de Reino Unido. Pine Island genera especial preocupación porque es el glaciar de la Antárdida que más hielo está perdiendo.