La Iglesia católica y el Movimiento Diversidad se reunieron en busca de “limar asperezas” y sobre la mesa quedó el tema más urgente para los gais: el plan de ley de matrimonio igualitario que está en el Congreso.
El grupo pro derechos gais aprovechó el encuentro para pedir a los obispos que permitan el impulso a este plan y al proyecto ley de reconocimiento de identidad de género.
La reunión se dio este lunes 18 de abril, en la casa de habitación de la exdefensora de los Habitantes, Lisbeth Quesada, en Escazú, San José.
En la cita participaron el presidente de la Conferencia Episcopal de Costa Rica (Cecor), monseñor Óscar Fernández Guillén; el obispo de Alajuela, monseñor Ángel Sancasimiro; y Marco Castillo, dirigente del Movimiento Diversidad, así como algunos otros representantes de ambos frentes.
La cita se dio a instancias de la Cecor, dijo Castillo, y se realizó para suavizar el ambiente entre ambos grupos, reconoció el obispo Sancasimiro.
Esta es la primera vez que autoridades de la Iglesia se reúnen con un movimiento a favor de los derechos gais, expresó Castillo.
Según Sancasimiro, la reunión surgió por iniciativa de ambos grupos. “Se hizo por el deseo de acercarnos y entendernos un poquito mejor”, aseveró.
Proyectos varados. Ambas iniciativas están en la corriente legislativa; sin embargo, los grupos que impulsan los derechos gais temen que la Iglesia los bloquee.
“No llegamos exactamente a un acuerdo, sino que llegamos a que ellos conocieran nuestro planteamiento”, dijo Castillo.
En el caso del matrimonio igualitario, Castillo recalcó que “no se trata de un matrimonio religioso” sino civil, y destacó que las parejas gais que quieran “casarse en un matrimonio religioso, pueden hacerlo en la Iglesia luterana”.
En lo que toca al plan sobre reconocimiento de identidad de género, la propuesta pretende que quienes deseen cambiar su identidad de género ante el Registro Público lo hagan con un cambio en la partida de nacimiento.
Ante las peticiones de Diversidad, el vocero de la Iglesia dijo que no es momento para dar una respuesta, y que debe darle más “cabeza” al asunto. No descartó que haya futuras reuniones.
Los 48 nombres. Además, Castillo reveló que en la reunión también se habló de la información que manejan sobre el supuesto comportamiento homosexual de sacerdotes en la Iglesia católica.
Este punto es un tema sensible para la Iglesia, tras múltiples cuestionamientos sobre el tema.
“Pedimos respeto, pero ellos (obispos) no lo dan. Tenemos 48 nombres de curas que hablan en contra de la diversidad sexual siendo ellos homosexuales”, se quejó Castillo.
Sancasimiro evitó profundizar sobre estos nombres, y advirtió de que no llegarán a acuerdos bajo amenazas. “Según nos dijeron (en Diversidad), eso absolutamente no es una amenaza, y la verdad, está muy claro que un sacerdote no va a cambiar su forma de vivir el ministerio que ha recibido como don de Dios por amenazas”, aseveró el obispo.
Sobre los resultados de la reunión, Castillo expresó: “Me siento satisfecho de que se hayan preocupado de nuestro problema y esperamos que no sigan oponiéndose a nuestros derechos. Hay muchos católicos que se sienten mal por ver la oposición a nuestros derechos, más cuando el mismo Papa pide respeto, y ellos siguen oponiéndose a nuestros derechos”.